Twitter inicia despidos masivos mientras sus empleados preparan una batalla legal

Lo hará vía mail a cada uno de sus empleados. Y se espera que la medida afecte en total a unos 3.700 trabajadores, la mitad de la plantilla. Algunos de ellos, de hecho, ya han sufrido el bloqueo de sus cuentas personales y de acceso al correo corporativo desde la noche del jueves.

En un mail remitido hace unas horas a todos los empleados, la red social reconoce que este proceso «impactará en un número de personas que han realizado valiosas contribuciones a Twitter, pero la medida es lamentablemente necesaria para asegurar el éxito de la empresa».

La fórmula empleada para acometer este recorte ha sorprendido a un 'staff' que ya ha sufrido la salida de importantes directivos desde el primer día en el que Musk desembarcó en la empresa. En medio del nerviosismo laboral, el también CEO de Tesla ha decidido cerrar las puertas de la empresa este viernes de forma temporal «para ayudar a garantizar la seguridad de cada empleado, así como los sistemas de Twitter y los datos de los clientes».

La idea que maneja Elon Musk, que también ha propuesto cobrar 8 dólares mensuales por las cuentas verificadas para monetizar la red social, es exprimir 1.000 millones de dólares al año en ahorro de costes de la compañía. Una cifra que está en línea con lo que debe devolver a las entidades que le prestaron dinero para comprar Twitter.

Pero puede que su objetivo se encuentre con algunos obstáculos. En concreto, con los costes judiciales a los que puede tener que hacer frente si sale adelante la batalla legal que ya está abierta en la corte federal de San Francisco.

Según informa Marketwatch, ya se ha interpuesto una demanda colectiva que hasta ahora cuenta con cinco querellantes, tres de los cuales sufrieron el jueves el bloqueo de sus cuentas de Twitter, por lo que entienden que ya han sido despedidos sin previo aviso. A ellos se suma un cuarto que también fue despedido el martes sin ningún tipo de notificación por escrito ni el pago de una indemnización. Y se espera que a partir de este mismo viernes se sumen muchos más.

La demanda sostiene que Twitter estaría violando la normativa que regula la notificación de ajuste de trabajadores en California (WARN, por sus siglas en inglés), que establece que las grandes empresas deben notificar estos procesos de despidos masivos con alm enos 60 días de antelación.

Las excentricidades demostradas por el empresario no solo mantienen en alerta a los empleados de la red social, tanto los que se van, como los que se quedan. También ha descolocado por completo a numerosas marcas y anunciantes en la red social. El fabricante de vehículos Volkswagen ha sido el último en anunciar que retira su inversión publicitaria en Twitter hasta tener una mayor certeza sobre los planes de Musk, siguiendo los pasos que ya han acometido otras grandes firmas como L'Oréal o General Motors.