Renault fabricará cinco vehículos híbridos en España

En el acto, que estuvo presidido por el rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se explicó que el plan contempla la fábrica de Palencia como la encargada de producir tres nuevos vehículos de los segmentos C y D-Suv, que llegarán de 2022 a 2024. Por parte de la fábrica de carrocería y montaje de Valladolid se encargará de producir en 2024 otros dos modelos de los segmentos B-Suv y B+Suv.

De Meo confirmó que estas adjudicaciones convertirán al centro de I+D+i de Valladolid en el «líder del sector en ingeniería industrial en España«, ya que ampliará sus competencias con nuevos productos relacionados con sistemas de ayuda a la conducción y con nuevas tecnologías, como el hidrógeno. Además, resaltó que las fábricas españolas se posicionarán en «la nueva era de la movilidad», porque todos estos modelos son «productos electrificados», por lo que el país será «uno de los polos de electrificación e hibridación más importante» para la empresa.

Según sus estimaciones, más del 35% del mercado en España y el 45% en Europa será de coches híbridos o híbridos enchufables en 2025, pro lo que en estas fábricas se producirán los vehículos con mayor demanda. Por ello, el directivo consideró que este plan no solo impulsará la recuperación de la compañía sino «que impulsará la recuperación del país» ya que se va a crear empleo y se va reforzar el tejido industrial.

La elección de España reconoce que fue por la «competitividad de sus plantas», que se encuentran entre »las más competitivas« de la marca. Por ello, desde los sindicatos mostraron su satisfacción. CC OO apuntó en un comunicado que este proyecto da «viabilidad» a las factorías de Renault en España mediante su entrada en la «tecnología del futuro». Para ellos este anuncio es «muy positivo» para el país y un «paso fundamental» para los trabajadores del grupo en España. Recordaron el contexto en el que se ha hecho este anuncio, ya que Renault anunció a mediados de 2020 una fuerte reestructuración de empleo, con la pérdida de 15.000 puestos en todo el mundo y una bajada de producción de vehículos, lo que dejaba un futuro «poco halagüeño».