La naviera Maersk elige España para una planta mundial de metanol verde

Así lo ha anunciado la compañía, cuyo consejero delegado ha mantenido un encuentro esta mañana con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Palacio de la Moncloa. La decisión final de Maersk llega después de varios meses de conversaciones con el Ejecutivo español al que ha planteado un ambicioso plan de inversiones que supondrá la inyección de unos 10.000 millones de euros hasta el año 2030, así como la creación de unos 85.000 puestos de trabajo de forma directa e indirecta en torno al proyecto.

La idea de la compañía pasa por producir unos dos millones de toneladas de metanol verde en esos nuevos puntos estratégicos andaluz y gallego. Serían unas 200.000 toneladas hasta el año 2025; un millón hasta el año 2027; y alcanzar los dos millones en el año 2030. El grupo ha decidido generar su propio metanol verde para ir sustituyendo al gasóil a la vista de la dificultad para encontrar socios que se encarguen de producir este combustible ecológico por la falta de alternativas empresariales.

En este contexto, el proyecto de Maersk no solo servirá para abastecer a sus barcos dentro de las diferentes rutas mundiales, sino que además se encargará de la producción de ese metanol verde a través de los cuatro gigavatios (Gw) de energía renovable que necesitará también producir para generar este combustible. Se trata de hasta 80 parques eólicos y solares que, bien adquirirá o bien desarrollará en la Península para completar el proyecto. El metanol verde para mover los barcos de forma sostenible se produce a través de hidrógeno verde mezclado con CO2 biogético, que sale a partir de la biomasa. Ese hidrógeno verde se obtiene con energía procedente de centrales renovables.

Las negociaciones con el Gobierno han derivado en esta decisión de ubicar en España este 'hub' marítimo, a la espera de que contar con ayudas públicas para afianzar el proyecto. El Ejecutivo, junto a los Ministerios de Industria, Transportes y Transición Ecológica, está valorando si la compañía podrá acceder a parte de los fondos europeos para la recuperación, e incluso se plantea la posibilidad de entrar en el proyecto con capital público, aunque son decisiones que aún deben ser evaluadas en los próximos meses.

El de España sería el segundo gran punto de abastecimiento de metanol verde para su flota de buques, después del que ya ha anunciado que instalará en Egipto. La decisión de mirar hacia Andalucía y Galicia responde a lo que Maersk considera que serán las nuevas rutas marítimas mundiales, muy condicionadas por los combustibles verdes. Los barcos ya no podrán cargar gasóil casi en cualquier puerto del mundo, como ocurría hasta ahora, sino que tendrán que hacerlo en zonas específicas que cambiarán esas rutas mundailes.

Maersk tiene 700 buques en todo el mundo y una cuota de mercado del 20%. Solo en España cuenta con 1.700 empleados directos, opera en 12 puertos y posee cinco terminales marítimas, etc. La firma se ha comprometido a descarbonizar sus operaciones antes del año 2040, teniendo en cuenta que el gasto en combustible representa un 30% de sus costes ordinarios.

Para el Gobierno, esta decisión «crea un ecosistema para España, el país donde la producción de hidrógeno verde va a ser la más competitiva por la cantidad de eespacio, sol y viento que tiene».