El Tribunal de Cuentas constata bonificaciones indebidas de empresas por formación

Asimismo, ha observado que en los permisos individuales autorizados, la formación podría responder, en numerosas ocasiones, a una planificación empresarial en lugar de a una iniciativa voluntaria de los trabajadores.

En cuanto a la evaluación de la formación de demanda, el SEPE no había elaborado un informe específico, evaluando el impacto de la formación de demanda en el mantenimiento del empleo y en la mejora de la competitividad de las empresas, ni acerca de la eficacia y la adecuación de las acciones formativas impartidas a las necesidades de las empresas. Asimismo, tampoco había realizado un informe sobre la eficiencia de los recursos económicos y de los medios empleados.

El Tribunal apunta, entre otras conclusiones, que algunas entidades incrementaron de forma injustificada los costes facturados a las empresas bonificadas. Otra de las deficiencias encontradas es la referida a la falta de identificación en cuenta separada de su contabilidad de los gastos de ejecución de las acciones formativas desarrolladas y financiadas mediante el sistema de bonificaciones en las cuotas de Seguridad Social. El informe señala que la documentación que ha sido entregada al Tribunal de Cuentas no contiene toda la información requerida por este, como es el caso de la comunicación a la representación legal de los trabajadores, por parte de la empresa beneficiaria, ya que no consta la identificación de los trabajadores que realizaron las acciones formativas, así como el calendario previsto para las mismas, impidiendo verificar la veracidad de la bonificación aplicada como consecuencia de los permisos individuales de formación autorizados.

Tras los fallos detectados, el Tribunal de Cuentas recomienda al Ministerio de Empleo efectuar un desarrollo normativo adecuado de la iniciativa de formación de demanda y que se incremente el control.