La OCU denuncia a Danone, Campofrío, Colacao... por vender menos al mismo precio

Esta estrategia la considera «competencia desleal» la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), quien este jueves dio un paso más y presentó una denuncia por llevar a cabo esta práctica ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) contra seis importantes empresas del sector de la alimentación, como son Pastas Gallo, Danone, Pescanova, Colacao, Tulipán y Campofrío. Una denuncia, además, que todo indica que se extenderá a más compañías puesto que la organización ha advertido que no descarta ampliarla a más productos y firmas, puesto que un estudio propio ha comprobado que al menos un 7% de los productos de la cesta de la compra se ha visto afectado por la reduflación.

El incremento de los precios de la energía y materias primas no se ha quedado solo en esos sectores y de forma transitoria, como en un principio se esperaba, y se ha extendido a la mayor parte de la cesta de la compra, también a productos básicos, de forma que el coste de la alimentación se ha encarecido un 9,4%. Para no tener que repercutir este fuerte incremento a los clientes, lo que que podría tener una penalización, se ha popularizado este fenómeno.

Aunque en principio, desde el punto de vista de la información en el envase y etiquetado de los productos se cumple con la normativa, la OCU piensa que en realidad puede considerarse una práctica de competencia desleal, puesto que no hay una información clara para el consumidor sobre la subida precios y esa falta de transparencia altera la competencia. «El consumidor no tiene una información completa sobre la verdadera naturaleza y características del producto», lo que le induce a «tomar decisiones erróneas que pueden afectar a los fabricantes que sí suben de forma clara el precio y que se pueden ver penalizados frente a los que enmascaran las subidas con reducciones en la cantidad», sostiene la OCU.

Por todo ello, la OCU pide a la CNMC que determine si la reduflación, dar menos por lo mismo, es una práctica que pudiera alterar la competencia de forma desleal, debido a la falta de transparencia para los consumidores. Además de la denuncia a la CNMC, va a informar al Ministerio de Consumo para que estudie la implantación de medidas que obliguen a los fabricantes a mejorar la información que dan a los consumidores sobre el precio y la cantidad de sus productos.

La organización, con independencia de la legalidad de la reduflación, critica estas «prácticas opacas», puesto que en la mayoría de las ocasiones es imperceptible para los consumidores. Por eso es necesario que se advierta de estas «subidas encubiertas».