Bruselas asegura que los pescadores del Mediterráneo podrán mantener los mismos días de pesca si aplican medidas sostenibles

El pacto -junto con los acuerdos con Reino Unido y Noruega- cierra el total de capturas para 2025 de la flota europea- y establece las oportunidades de pesca de los 8.700 barcos del sector pesquero español. Las negociaciones se han alargado hasta altas horas de la madrugada por el bloqueo en la negociación sobre las cuotas del Mediterráneo Occidental. Francia, España e Italia se unieron para rechazar la propuesta de la Comisión Europea, que proponía un recorte del 66% de los días de pesca. Para el ministro de Agricultura y Pesca español, Luís Planas, esta propuesta «no servía de base» para la negociación por ser contraria a los intereses del sector pesquero.

Finalmente se ha llegado a un acuerdo que mantiene la reducción de los días de pesca a 27, pero que permite mantener los 130 días de 2024 si se aplican métodos selectivos de capturas con el uso de redes de 45 milímetros en pesca costera y de 50 milímetros en la de profundidad, las vedas en ciertas zonas y medidas innovadoras de pesca. A pesar de que se ha logrado mitigar el golpe, en el Mediterráneo, el sector critica «el esfuerzo adicional» que supone para la flota la necesidad de cambiar las mallas otra vez.

Noticia relacionada

De qué habla Europa cuando pide que la pesca en el Mediterráneo sea más sostenible

Rocío Mendoza

El secretario general de la Confederación española de Pesca, Javier Garat, aseguró que esta medida «tendrá consecuencias sociales y económicas en el sector pesquero del Mediterráneo. Veremos cuántos logran sobrevivir». Y es que la flota española era la más afectada por esta propuesta con una exigencia de reducción de los días de esfuerzo del 79%. En ese sentido, el ministro de Agricultura y Pesca español, Luís Planas, ha asegurado que ha hablado con la Comisión Europea para «buscar los mecanismos para aliviar el esfuerzo» del sector.

En cuanto al Atlántico, el ministro se ha mostrado «muy satisfecho» con los resultados que mantiene el total admisible de capturas (TAC) de merluza sur en 10.953 toneladas y eleva las capturas de gallo un 22,8% (hasta las 3.942 toneladas) y las de rape un 16,8% (hasta las 4.340). «Se trata de especies muy valoradas por nuestros pescadores de las flotas del Cantábrico -que engloba a Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi-», ha asegurado Planas. Se duplican las capturas de cigala del Cantábrico, hasta lsa 12,4 toneladas. Caen, sin embargo, las cuotas de chicharro, que se reducirán un 65,95 hasta las 14.668 toneladas, una cifra que se ve compensada por las posibilidades de pesca de esta especie en aguas compartidas con Reino Unido.

En el reparto de las especies de las aguas compartidas con Noruega se aumenta el total de capturas de bacalao ártico que podrá pescar España, hasta las 2.627 toneladas, lo que beneficiará especialmente a los pescadores gallegos. El acuerdo con Reino Unido, en cambio, ha reducido un 20% las capturas de merluza norte, frente al 30% que se planteaba en un inicio y crecen las capturas de chicharro, «lo que supone un importante alivio para las flotas del Cantábrico noroeste», ha detallado Planas. También experimentarán un importante incremento en las posibilidades de pesca de rape norte del 54%, hasta las 3.817 toneladas. Se reducen, por el contrario, las cuotas de verdel, un 22%, hasta las 21.718 toneladas.