Un 'Black Friday' con pocas ofertas por el miedo al desabastecimiento

Encuestas de portales como Idealo o Milanuncios confirman que casi la mitad de la población piensa comprar algún tipo de producto durante estos días. Se espera un desembolso de en torno a unos 250 euros por persona, una cifra aún lejos de los 600 que espera gastar en Navidad pero nada desdeñable para una costumbre heredada que hace unos años era desconocida en el país.

Gran parte de los que apuestan por comprar en este período lo hacen motivados por la crisis de suministros. Además, el ahorro forzoso que las familias han acumulado durante la pandemia, y que el Gobierno cifra en unos 50.000 millones de euros, es la gran esperanza para la reactivación definitiva del consumo, con un aumento de la demanda de todo tipo de productos y servicios que, sin embargo, no siempre podrán ser cubiertos.

Aunque España y Occidente en general cuentan con tasas de vacunación elevadas que han permitido encauzar la pandemia, en los países menos desarrollados el proceso está más retrasado y los parones en las fábricas impiden suministrar desde chips claves para toda la tecnología a materias primas como plástico, madera o acero.

Esta situación va a implicar problemas en determinados artículos, que llegarán a cuentagotas y, por ello, muchos adelantan sus compras para no quedarse sin ellos. Leandro Real, director asociado de Turnaround, Transformation & Working Capital de KPMG en España admite que no habrá desabastecimiento generalizado, «pero sí puede haber retrasos o roturas puntuales de 'stock'».

El mejor ejemplo son las consolas de videojuegos, uno de los regalos más típicos en estas fechas que no van a poder comprarse sin reserva ya que gigantes como Sony o la misma Nintendo ya han avisado de que el suministro será bajo. Van a faltar un 15%-20% del total de unidades para cubrir la demanda. Y este problema va a ser el responsable de que esta temporada de descuentos apenas presente rebajas. Enrique Porta, socio responsable de Consumo y Distribución de KPMG en España, recuerda que al inicio de este período de compras se suelen realizar «promociones agresivas para activar el consumo y limpiar los excesos de 'stock', pero este año puede no darse el caso».

Una tesis a la que se suma Packlink, la startup especializada en soluciones logísticas y cuyos responsables admiten que incluso hay «determinadas campañas contra los descuentos» y más en un contexto en el que traer o fabricar los productos es más caro por el tapón en el comercio mundial y el auge de los precios del transporte marítimo.

Desde la Universitat Oberta de Catalunya son aún más tajantes y afirman que no vamos a tener «la misma variedad de productos ni descuentos» y alertan de que los precios pueden llegar a subir. Así lo evidencian también las empresas hasta el punto de que gigantes tecnológicos como Lenovo, acostumbrados a reducir el precio sus productos, han avisado de que los clientes no se van a encontrar rebajas por las pocas existencias.

Pero esta contradicción no parece que vaya a empañar mucho los próximos días. Se cree que el consumidor va a seguir consumiendo, tanto ahora como en Navidad con o sin ofertas. Y si no se encuentra un determinado bien se sustituirá por otro. La temporada será, sin duda, mejor que la de 2020.

Este aumento de ventas implicará contrataciones. Según la firma especializada Randstad, se van a generar 43.200 puestos de trabajo, lo que representa un 50% más que durante el mismo período de 2020. Siete de cada diez de estos nuevos empleos se generarán dentro del sector logístico, el gran beneficiado por el auge protagonizado por internet.