Goirigolzarri cobrará un fijo anual de 1,65 millones como presidente de CaixaBank

«Se hace constar que hasta la fecha de la aprobación de esta política D. José Ignacio Goirigolzarri Tellaeche no ha percibido compensación alguna por el ejercicio de sus funciones ejecutivas como Presidente Ejecutivo», indican desde CaixaBank. Sin embargo, cuando se apruebe la nueva política de retribuciones del consejo, tendrá efectos retroactivos a la fecha de aprobación del contrato de Goirigolzarri, con fecha del 30 de marzo, aunque fue consejero desde el día 26.

En los 1,65 millones que cobrará el directivo se incluye la remuneración por la condición de miembro del Consejo de Administración de CaixaBank o de sus comisiones, que asciende a 150.000 euros.

Por su parte, la remuneración variable en forma de bonus para 2021 será de 200.000 euros. En este caso, Goirigolzarri sí podrá aspirar al total de la cuantía, en la medida en que Bankia queda absorbida por CaixaBank como consecuencia de la fusión, y no percibirá remuneración variable alguna por este concepto por las funciones y responsabilidades desempeñadas durante los primeros meses del ejercicio 2021.

Del mismo modo, el banquero será beneficiario del tercer ciclo del Plan de Incentivos Anuales Condicionados vinculados al Plan Estratégico 2019-2021 del Grupo CaixaBank, el cual fue aprobado por la junta del 5 de abril de 2019. El Plan se instrumenta a través de la asignación, a título gratuito, en los años 2019, 2020 y 2021, de un número de unidades, que servirán como base para fijar el número de acciones de CaixaBank a entregar, en su caso, a cada beneficiario. En este sentido, el número máximo de acciones que podrá percibir, conforme a la Propuesta de Acuerdo 15º de la Junta General de Accionistas de 2021, asciende a 105.786 acciones de CaixaBank.

Goirigolzarri también tendrá derecho a una póliza de seguro de incapacidad y defunción que tiene como coste estimado en base anual un total de 65.279 euros. Finalmente, será beneficiario de un seguro de asistencia médica que se valora en 2.352 euros para 2021.

Los accionistas convocados para el próximo 14 de mayo también tendrán que aprobar la política de dividendos de la nueva entidad que, como estaba previsto, cumplirá con los límites impuestos hasta septiembre por el Banco Central Europeo (BCE), que establecen que las entidades financieras no pueden distribuir más de un 15% del beneficio conjunto de 2019 y 2020 este año.

En total, se propondrá a la junta un dividendo en efectivo de 0,0268 euros por acción con cargo a 2020, lo que supone repartir 216,09 millones de euros, el 15% del beneficio proforma de CaixaBank y Bankia.

La idea es que el pago se haga efectivo a partir del 24 de mayo. Con esta perspectiva, el principal accionista de la entidad, la Fundación la Caixa, percibiría 65 millones de euros por este dividendo, mientras que el Estado, con una participación del 16,1% a través del FROB, ingresaría 35 millones de euros.