El beneficio del Santander se desploma un 82% tras provisionar 1.600 millones por la crisis

El banco ha tomado esa medida a tenor de la información macroeconómica futura que tiene entre sus manos, como los cambios que se prevén en el PIB, el desempleo o los precios de la vivienda. Y aclara que ese cargo «se basa en una estimación anticipada de las pérdidas en préstamos a causa de la pandemia». Sin embargo, el Santander reconoce que «todavía es demasiado pronto para conocer todos los efectos económicos de la crisis» o sacar conclusiones al respecto.

En la presentación de resultados de ayer, el consejero delegado, José Antonio Álvarez, explicó que la entidad trabaja con un escenario muy similar al publicado la semana pasada por el FMI, es decir, un 8% de caída del PIB. No obstante, maneja varias posibilidades en torno a esa incertidumbre, en especial para la recuperación: «Una combinación de la recuperación en V y otra que se alargue más», afirmó.

Ante este panorama, el ejecutivo ha anticipado que estima que la moratoria hipotecaria subirá en los próximos meses tanto en hipotecas como crédito al consumo. De momento, la morosidad media del banco en España roza el 7%. La mayoría de las moratorias hipotecarias autorizadas en el último mes son concedidas voluntariamente por el banco sin necesidad de cumplir los criterios del Gobierno, y está concediendo prácticamente el 100% de las solicitudes.

Las acciones del Santander han cerrado con un alza del 4,7% a más de dos euros por título, después de cotizar durante toda la jornada en positivo. Los inversores valoran más las medidas de contención aunque sea a costa del beneficio a corto plazo.

La presidenta del banco, Ana Botín, señaló en un comunicado que el grupo se encuentra «en una posición sólida». «Las provisiones de este trimestre refuerzan nuestras ratios de cobertura». En cualquier caso, Botín aclaró que la entidad «revisará los objetivos estratégicos cuando tengamos una visión más completa del impacto de la crisis». «Estamos preparados para superar la recesión prevista gracias a la diversificación de nuestra cartera», indicó. Un 59% de su resultado proviene de América.

El beneficio ordinario (sin provisiones) fue d e 1.977 millones, un 1% más. En España se situó estable en los 352 millones. Hasta marzo, la actividad en España ha registrado alzas en el crédito empresarial como consecuencia de los avales del ICO por el coronavirus. Santander ya ha consumido lo que se el asignó en las dos líneas de 20.000 millones:2.600 millones para grandes empresas y 7.000 millones a pymes y autónomos. José Antonio Álvarez espera que el crédito de empresas crezca de forma significativa en el segundo trimestre, por la demanda que aún está pendiente.