El ahorro de los hogares españoles cae a mínimos de 2018

Por un lado, el dato cuenta con una vertiente positiva, pues indicaría que los españoles están destinando el dinero guardado a cal y canto durante la pandemia al consumo, uno de los motores del crecimiento económico del país, en un periodo que además coincide con las vacaciones de verano. No obstante, resulta evidente que muchas familias se han visto obligadas a tirar de sus ahorros para cubrir gastos que hasta hace poco formaban parte del presupuesto habitual.

La desbocada inflación -que al cierre del tercer trimestre analizado aún se situaba en el 8,9%- ya empezaba a reflejar el encarecimiento de la cesta de la compra, que se sumaba a otros gastos más elevados como el de las facturas de la luz o del gas. Y a las familias no les ha quedado otro remedio que gastar más, en muchas ocasiones por encima incluso de lo que ingresan.

De hecho, los datos del INE reflejan cómo en el tercer trimestre, la renta disponible de los hogares aumentó un 1,6%, hasta 186.600 millones de euros, mientras que su gasto en consumo totalizó 192.034 millones de euros, un 12% más. Lo que se destina a inversión también registro una tendencia negativa, con una caída del 2,9% hasta los 12.901 millones de euros, al tiempo que el ahorro se redujo en 5.986 millones de euros.

La caída de la tasa de ahorro se refleja mejor si se compara en términos interanuales. A cierre de 2021 se situaba en el 12,3% sobre la renta disponible. El máximo se alcanzó en el segundo trimestre de 2020, en pleno confinamiento por la pandemia, cuando la tasa superaba el 25%.