Pymes riojanas o cómo modificar el ecosistema regional europeo

«Llevan toda la vida diciéndonos que somos europeos, así que vamos a sacar partido de lo que esto supone». Son palabras de Jorge López, CEO de Creativitic, pero bien pudieran ser las palabras de una generación, ésa que mira «sin miedos ni complejos» a Europa. Ellos lo hicieron en el 2011 y desde entonces no pueden dejar de hacerlo porque saben que su futuro depende de ello. «Debemos estar donde hay que estar, y ese lugar es Europa. Sabemos que nuestra tecnología, por la propia configuración de La Rioja, no la íbamos a poder vender aquí, no tenemos los clientes necesarios. Así que nos fuimos donde sí nos la podían comprar», apunta. Y ese lugar pasa por Bruselas, «donde llegas a través del programa Europa + Cerca, te presentan, te dejas ver y realizas contactos. A partir de ahí, todo lo demás es cuestión de tiempo, de talento y de madurar los proyectos», para lo que hace falta dinero y Europa lo tiene. «Estamos obligados a amortizar el concepto Europa», cierra Jorge López.

¡ Y vaya si lo tiene! Para el curso reciente, es decir el que va del 2014 al 2020, Europa dispuso de una bolsa de 76.800 millones de euros a repartir entre las regiones que conforman este crisol de intereses donde priman que sean compartidos y que sean proyectos reales, listos para establecerse en sus respectivos mercados. Es lo que llaman en letras de neón, Horizonte 2020, «donde La Rioja ha obtenido ya 11 millones de euros en los últimos tres años, que viene a ser la misma cuantía que nos llegan a través de los Fondos FEDER, y que sumados a los 25 del anterior Programa Marco hacen un total de 36 millones de euros del 2007 a esta parte», indica Enrique Esteban, coordinador de Transferencia Tecnológica para la Enterprise Europe Network desde la ADER. Es una especia de ojeador regional que envía a los mejores a jugar en las grandes ligas, como ya hiciera con Creativitic o Solarbox.

«Salimos del pueblo para competir en Europa. Y es duro, requiere de un arduo trabajo, hay que ser sinceros, pero esto es lo que se tiene que hacer para destacar un poco», apunta Javier Hernández, director técnico de Solarbox. Ellos lo intentaron por su cuenta, «con nuestros propios recursos», pero esto de Horizonte 2020 no es solo una cuestión monetaria, de financiación. Al desarrollarse en colaboración, los proyectos se mejoran, se perfeccionan, evolucionan, crecen en esta especie de gimnasio europeo de las grandes ideas. Para jugar en la Champions hay que estar muy en forma.

Creativitic, Solarbox... y otras empresas riojanas, pequeñas, que han visto su negocio orientado a nivel europeo prácticamente desde su inicio. «Estábamos en el Vivero de Empresas y ya conseguimos un proyecto europeo. Aquella tarjeta que entregué en esa reunión en Luxemburgo nos cambió la vida para siempre», recuerda Jorge López, que viaja tanto en las misiones del Gobierno de La Rioja como por su cuenta propia. Y Solarbox también se ha metido en esta rueda. Saben que sus negocios necesitan competir donde realmente se establece una competencia extrema... para quizás en unos años levantar la Copa de Europa. Como lo lleva haciendo una pyme riojana desde hace unos cuantos años.

Se trata de Avanzare. Es una referencia en nanotecnología. Es un vivero de talento, de ideas, de financiación europea, claro... «Somos la primera empresa nacional en nuestro sector, y estamos entre las tres más importantes de Europa». Lo reconoce su gerente, Julio Gómez. ¿Y cómo lo han hecho? «Sabíamos que por ser riojanos, por nuestro propio ecosistema, nos tocaría estar entre las 150 empresas europeas más importantes de Europa. Sin embargo, estamos entre las tres primeras. Y esto ha sido posible porque no nos hemos conformado, porque hemos acumulando talento y porque hemos trabajado por ello desde el primer día», destaca Gómez. Les ha llevado a generar tecnología por encima de lo habitual, y por tanto a participar y liderar importantes proyectos a nivel europeo, en los que se manejan fondos realmente importantes, que «a su vez nos permiten mejorar, contratar a gente, ser mejores»... Lograr esa I+D real, la que se halla en la médula espinal de las organizaciones innovadoras, que les permite salirse el ecosistema natural de su propio entorno y elevarlo a un siguiente escalón.

Pymes riojanas empeñadas en cambiar el ecosistema natural de La Rioja en Europa. Algo más probable que el Logroñés -el que sea- juegue en la Champions League.