La AIReF estima en 1.443 millones el ajuste de las comunidades para cumplir el déficit

Pero esa reducción del gasto autonómico no será homogéneo y se concentrará en nueve administraciones regionales, aquellas que según el organismo deben tomar medidas adicionales para cumplir con el límite marcado. En concreto se trata de Aragón, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Madrid, Murcia y la Comunidad Valenciana. En su opinión, los restantes gobiernos regionales cumplirían sin necesidad de medidas adicionales.

Hacienda ya había pedido por carta a doce comunidades que aprobaran un acuerdo de no disponibilidad del gasto para poder corregir su desfase. La Autoridad Fiscal rebaja esa cifra a nueve comunidades, pero confirma que si esos gobiernos regionales no toman medidas llevaría a un déficit agregado del entorno del 0,9%. Esto es dos décimas superior.

Según sus estimaciones, la mayor corrección recaerá en Cataluña y Madrid con un ajuste presupuestario de 426 y 425 millones, respectivamente. Le sigue la Comunidad Valenciana (212 millones), Castilla y León (112 millones), Castilla-La Mancha (79 millones) Aragón (70), Murcia (58), Extremadura (36) y Cantabria (25).

La AIReF explica que estos acuerdos de no disponibilidad tienen que identificar las partidas sobre las que se aplicará, estableciéndose las garantías necesarias para hacerlo efectivo. Además, recuerda que deberán plasmarse en los correspondientes Planes Económico-Financiero (PEF) que se presenten en mayo.

Objetivos asimétricos

Por su parte, el organismo presidido por José Luis Escrivá, considera que los escenarios de ingresos y gastos recogidos en los presupuestos aprobados por Andalucía, Asturias, Baleares, Canarias, Galicia, Navarra, País Vasco y La Rioja deberían llevar a un déficit no superior al 0,7% del PIB. De hecho, considera que permitiría alcanzar un déficit agregado del entorno del 0,4% de su PIB regional. Por lo tanto, para estas comunidades no sería necesario adoptar, en este momento, un acuerdo de no disponibilidad sobre sus presupuestos iniciales.

Asimismo, la AIReF insiste en que la fijación de un mismo objetivo de déficit para todas las comunidades es un error al suponer un riesgo para el cumplimiento global de la estabilidad presupuestaria. En su opinión, esta fórmula permite en algunas comunidades una relajación de los compromisos y previsiones de sus presupuestos aprobados, mientra que para otras requeriría un esfuerzo que presenta riesgos para su materialización.