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La colocadora argentina Tatiana Vera llegó a Haro hace dos temporadas, procedente del Gimnasia y Esgrima La Plata y siguiendo los pasos de su compañera Sofía Bulgarella. Después de dos buenos años que le han conducido a formar parte de la selección albiceleste, la suspensión ... de la Superliga la declaración del estado de alarma en España ha atrapado a Tatiana Vera, de 27 años, en Haro, igual que a su pareja, el también argentino Timoteo Fallesen (24), jugador de fútbol del Tedeón de Navarrete.
La situación para ellos empieza a ser preocupante porque, al cancelarse las ligas, se han rescindido sus contratos y no tienen ingresos, solo algunos ahorros. Por suerte, el Club Voleibol Haro les ha permitido residir en el piso habitual durante la campaña, el que compartía Vera con Aida y Ana Belén, y la Embajada de Argentina les ha enviado cajas con alimentos. «El piso y todos los suministros los está pagando el club y la gente de la directiva intenta estar pendiente de ella, dentro de la circunstancias tan complicadas para todos», informan desde el OSACC Haro Rioja Voley.
El problema es que Argentina ha realizado una lista de personas que quieren regresar al país y, aunque tanto Vera como Fallesen compraron billetes de avión, el vuelo no se ha producido y, de momento, Aerolíneas Argentinas no les confirma que el avión se flete. «Hay mucha gente varada por Europa que quiere regresar. Nosotros teníamos vuelo para volver, pero todavía no lo han fletado para repatriarnos, así que tenemos que pagar uno nuevo», expone la jugadora de voleibol.
Precisamente ayer apareció un hilo de esperanza, una nueva promesa en forma de vuelo a final de mes. «Están dando prioridad en las listas a la población de riesgo (mayores, personas enfermas, embarazadas...). Nosotros hablamos a diario con la embajada por nuestra situación y nuestros padres, allí, se han movido y contactado con el consulado. Nos han dicho que nos llamarán», explica Tatiana Vera.
«Estamos bien, pero nos pagaron hasta que terminamos de entrenamos y subsistimos con ahorros. No vinimos de turismo, queremos volver», declara Vera, quien también critica que «la información es muy relativa». En cuanto a su club, el OSACC Haro, que le está ayudando durante este trance, reconoce que «han sido muy atentos y se han preocupado mucho por nosotros, nos han dejado el piso y se han puesto a nuestra disposición».
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