Amelia Portero, a punto de 'salir a la cancha' sanitaria

«En temporada me doy de baja para que no me llamen al no estar disponible y, cuando acabo, me vuelvo a dar de alta, así que en cuanto llegué a Almería me puse disponible», explica Amelia Portero desde Andalucía. Su madre también es enfermera, en su caso del hospital Torrecárdenas de Almería, donde la hija ya ha trabajado algún verano, en el área de Pediatría (en el San Pedro Amelia Portero trabajó en Neonatología). «Mi madre ha dado directamente mis datos por si hiciera falta. Las cosas aquí, en Almería, no están del todo mal, pero puede que sea cuestión de tiempo», explica la jugadora de voleibol.

Sea por su forma de ser o por vocación, lo cierto es que Amelia Portero, que también ha jugado en la selección nacional, no tiene miedo al contagio. «Vivo con una enfermera, mi madre, y si ella se contagia, me contagiaré igual, como todos en casa, pero esperemos que no ocurra. Ella no ha parado de trabajar y está en contacto con los pacientes todos los días», advierte la jugadora. Ahora, ya sin competición a la vista, Amelia Portero está deseando salir a otra cancha, la sanitaria, donde su papel también será relevante. «Siempre que he podido he trabajado al acabar las temporadas. En cuanto llegué le dije a mi madre que quería echar una mano, además, ya me conocen en Torrecárdenas y, en cuanto necesiten gente, estoy disponible, soy más útil allí que en casa».

Amelia Portero está colegiada como enfermera en La Rioja y, asegura, «no paran de llegarme informaciones de que piden enfermeras, para ofrecernos, porque se necesitan, pero ahora estoy 'atada' en Almería».