Nadal engulle a Sousa

Joao Sousa, un jugador de tierra al que una excelente semana sobre el pasto inglés plantó en octavos, fue el calentamiento de un Nadal que se acerca a la copa de Wimbledon con cautela y buen pie.

El triunfo ante el portugués (6-2, 6-2 y 6-2) pone de manifiesto el excelso nivel del español sobre hierba. Pese a llegar sin partidos de competición oficial previos, el balear ha tomado las lecciones necesarias, apretado el paso y corregido los ajustes necesarios para ser competitivo en la superficie más difícil del circuito.

Sousa venía de ser el antihéroe en el All England Club. El luso había derrotado ante una pista 1 abarrotada al último reducto británico, Daniel Evans. Lo había hecho en un partido en el que su arrojo y su valentía habían quedado expuestas, levantando roturas en contra en todos los sets. Toda la energía y la capacidad de sacrificio que Sousa sacó ante Evans le faltó contra Nadal.

El balear está fresco y agusto. La organización, por tercer encuentro consecutivo, le colocó en la pista central y Nadal, que celebró el tradicional 'middle Sunday' -en el que no se celebran encuentros en Wimbledon- con una paella, devolvió el regalo con un encuentro casi inmaculado, cometiendo solo 10 errores no forzados, por los 30 golpes ganadores que conectó. La mejor señal, además, es la solidez al servicio, ya que, por segundo encuentro consecutivo, no concedió ni una sola bola de rotura.

Nadal avista un Wimbledon al que el año pasado la calamitosa organización del mismo le pudo privar de otro final. La espina de la derrota en 2018 en las semifinales ante Novak Djokovic duele cada día un poco menos, a medida que una posible revancha, que solo podría darse en la final se acerca.

Antes, un tímido Sousa salió despedido de la central, engullido y vapuleado por Nadal. Tres sets muy parecido le enterraron. Tres parciales en los que su juego de fondo quedaba en las antípodas del del de Manacor. Le podía valer para enfrentar el saque y red de Evans, pero no para contrarrestar el torrente de Nadal.

Será la séptima vez que Nadal esté en cuartos de final de Wimbledon, torneo que ha ganado en dos ocasiones (2008 y 2010) y esta vez se medirá al estadounidense Sam Querrey, que venció en cuatro parciales a su compatriota Tennys Sandgren. Nadal y Querrey, que ha conectado 100 saques directos en cuatro partidos, se han encontrado en cinco ocasiones, con cuatro triunfos para el balear y uno para el americano.

La mala noticia llegó en el cuadro femenino, ya que Carla Suárez, que jugaba por tercera vez los octavos de final de Wimbledon, no puedo acceder a cuartos al encontrarse con Serena Williams.

La estadounidense, en búsqueda se su título número 24 de Grand Slam, se deshizo de la española por un doble 6-4 y continúa en la pelea por igualar la marca de Grandes de la australiana Margaret Court.

El español Roberto Bautista sigue en un estado intratable y venció al francés Benoit Paire, por 6-3, 7-5 y 6-2, para acceder por primera vez a los cuartos de final del torneo de Wimbledon.

El de Castellón soportó los 18 saques directos de Paire, para romper su saque en cinco ocasiones, y mantener el suyo con un solo robo durante la hora y 52 minutos de lucha, y continua en su mejor Wimbledon, sin ceder un set en cuatro encuentros.

Además, Bautista se enfrentará en cuartos con el ganador del encuentro entre el argentino Guido Pella y el canadiense Milos Raonic.

Tras tres horas de partido, Fernando Verdasco no pudo con el belga David Goffin, número 23 del ranking ATP. El madrileño sucumbió por 7-6, 2-6, 6-3 y 6-4. Verdasco tuvo la clave del partido en el primer set, que desperdició cinco bolas de set en el 'tie-break'. A pesar de ganar el segundo, el tenista de 35 años no pudo hacer la machada y queda eliminado de Wimbledon.

Por otro lado, el belga ya espera al ganador del partido entre Novak Djokovic y Ugo Humbert.