Lajovic, un chollo para Nadal

Porque en octavos se encontró a un tenista perdido. Fue lo más parecido a un entrenamiento, eso sí, con la Philippe Chatrier prácticamente llena. Cuando se quiso dar cuenta el serbio, que pagó la inexperiencia, estaba al borde del rosco en el primer set. En un abrir y cerrar de ojos el número uno se encontró con dos roturas de servicio a su favor. Muchos regalos, demasiadas facilidades para un Nadal que se ha paseado en sus cuatro duelos en París.

Su derecha paralela empezó a funcionar bien pronto. Supo utilizar perfectamente ese golpe, que necesita para volver a hacer algo grande en París, para triturar el revés de Lajovic. Hizo lo que ha provocado muchos años pesadillas a Federer: destrozarle con derechas cruzadas sobre el revés del serbio, también a una mano.

Media hora duró el primer set. No mucho más el segundo. Y eso que de nuevo Nadal sacó por debajo de su nivel. En ese apartado, en el del servicio, fue en lo único en lo que Lajovic estuvo a la altura del español. Pese a esas dudas que han sembrado en su servicio esos problemas en la espalda, y que le hicieron sacar lento, lo cierto es que no necesitó su servicio para ganar. Lajovic seguía buscando su sitio en la pista. Sin soluciones, lo único que se encontró fue más tiros ganadores del número uno del mundo. Un repaso en toda regla.

Los juegos caían en blanco. En los dos primeros sets se puso 4-0 a favor y no quiso ser menos en el tercero. Un set, el definitivo, que fue otro paseo para conseguir su trigésimo segunda victoria en Roland Garros, algo que no había conseguido nadie en la historia. En cuartos espera David Ferrer, su rival el año pasado en la final de París. Otro español que llega lanzado a esta ronda. Ante Anderson únicamente cedió un set 6-3, 6-3, 6-7 (5) y 6-1 y se ha mostrado intratable hasta el momento. Será el 28º enfrentamiento entre las dos principales raquetas españolas después del triunfo de Ferrer en Montecarlo ante Nadal. Será una prueba de fuego para los dos mejores tenistas de España.