Nadal, ante su 'kryptonita'

Australia, donde se cruzan los caminos de los tres teóricos aspirantes a ganar el título -Djokovic, Federer y Nadal -, es terreno embarrado para el pupilo de Toni Nadal . En 2006, un problema con las plantillas le impidió jugar el torneo. Un año más tarde era el muslo el que le daba guerra y le debilitaba en cuartos de final. Ya en el 2010 tuvo que retirarse ante Murray mientras que al año siguiente a duras penas terminó su partido ante Ferrer en cuartos. Hace dos años, en 2013, no pudo ni jugarlo por lesión y el año pasado la espalda puso en bandeja el título a Wawrinka. Solo su triunfo en el 2009 aporta algo de esperanza para el supermán manacorense en la tierra de su kryptonita.

A esas pesadillas vividas en la última década en el 'grande' que menos veces ha ganado (una), hay que sumarle su mal inicio de 2015. Tras hacer las maletas en Doha antes de tiempo, él mismo se ha borrado de la lista de aspirantes: «El año pasado sí (era favorito), este año es una historia diferente. La pasada temporada era una situación distinta», explicó el balear. Nadal apenas ha jugado ocho partidos oficiales desde que cayese allá por junio del 2014 en Wimbledon.

Para empezar en las antípodas se las verá con un viejo rockero: Youznhy, lejos eso sí de los primeros puestos de las listas de ventas. El ruso, ahora el número 47 del ranking de la ATP, no gana un partido desde noviembre y no vence a Nadal desde el 2008. ¿La principal dificultad? La falta de confianza. «Vengo aquí con la máxima ilusión de hacerlo lo mejor posible, pero sabiendo que puede pasar cualquier cosa desde el primer día», apuntó Nadal .

También es de sobra sabido que lo suyo no es arrancar los 'grandes' arrasando. Va más al ralentí, de menos a más, siempre con un objetivo: la segunda semana del torneo, la que de verdad marca las diferencias. «Es un tema de ser rápido, más dinámico, con más confianza al golpear la pelota y jugar agresivo, con la confianza adecuada. Yo no tengo el automatismo de hacer todas estas cosas y los demás sí lo tienen», puntualizó.

En el horizonte, Berdych en unos posibles cuartos de final, Federer en semifinales -el suizo también debuta este domingo ante Yen-Hsun Lu- y Djokovic el último domingo del torneo, siempre a priori. Es el serbio precisamente el que todas las apuestas dan como principal candidato para suceder a Wawrinka como campeón. El suizo, junto a Murray, Dimitrov o Ferrer se encuentra en un segundo grupo de tenistas con ganas de marcha y de dar la sorpresa, de repetir las victorias conseguidas en el 2014 por Wawrinka en Australia o Cilic en Estados Unidos. En definitiva, de dar la campanada en un torneo en el que Nadal nunca lo ha tenido fácil.

Ferrer, Garbiñe y Suárez, opciones españolas

No solo de Nadal vive el tenis español. También Ferrer, noveno cabeza de serie, llega con ganas de hacer algo grande tras ganar el torneo de Doha a Berdych. En la madrugada del lunes al martes debutará ante el brasileño Thomaz Bellucci. El mismo día en el que comenzará su andadura Roberto Bautista (13) ante el austriaco Thiem, Feliciano López (12) contra el estadounidense Kudla, todos ellos antes del partido entre Robredo (15) y el francés Roger-Vasselin, que se juega, esta madrugada del domingo al lunes al igual que el debut de Carla Suárez. La canaria, decimoséptima favorita, inicia su andadura ante la joven Carina Witthoeft. Suárez y Muguruza son las dos grandes bazas españolas después de que ambas hayan empezado con fuerza el año -las dos cayeron en cuartos en Sídney. La hispano-venezolana debutará en la madrugada del lunes al martes contra la neozelandesa Erakovic.