Moyá abandona la capitanía de la Davis por la renuncia de los mejores

«Cuando son ocho, nueve e incluso diez jugadores los que fallan, se entiende que es algo que va más allá de ellos. La Davis es una competición algo desfasada, los jugadores se van haciendo mayores y quieren evitar lesiones, hay menos hambre, problemas de calendario... De los ocho o nueve jugadores con los que hablé, hubo cinco o seis razones distintas para no acudir a Brasil. Es mejor que me aparte y esté con mi familia, que al final me necesita más», reconoció este jueves el decepcionado Moyá, que firmó por un solo año como capitán de la Davis y no ha durado ni siquiera nueve meses. «He elegido un año porque las cosas hay que ganárselas y para mantener la motivación es la mejor manera. Si los jugadores no están contentos y la situación se tuerce, nos vamos a cenar y cada uno a su casa, pero si todo va bien y están contentos, no habrá ningún problema para continuar», aseguró el pasado 10 de octubre Moyà durante su presentación oficial como nuevo capitán de la Davis, para ponerse al frente de la Armada a partir del 1 de enero. «Firmé un año, en lugar de los dos que me ofrecieron, por un tema familiar: tengo tres niños pequeños y no estaba seguro de si me iba a ser fácil viajar. He comprobado que es complicado», desveló el miércoles en la entrevista de su despedida.

«Como ya sabréis no voy a ser el capitán de la Davis en el 2015. Difícil decisión. Gracias por vuestros mensajes de apoyo. Ha sido un placer», escribió este jueves Moyá en su cuenta de Twitter, en la que pidió «respeto máximo a todos los jugadores, responsables de los mayores éxitos de toda la historia de este deporte en España» y dio las gracias a la Federación Española (FET) y a su presidente, José Luis Escañuela, «por su confianza». «Ha sido una maravilloso aventura», aseguró el ex número uno del mundo. Moyá sólo ha dirigido dos eliminatorias. La de finales de enero en Alemania (4-1), con un equipo liderado por Feliciano López y Roberto Bautista, y la del pasado fin de semana por la permanencia en Brasil (3-1), con una selección encabezada por Bautista y Pablo Andújar, para descender después de 18 años en la élite, tras las renuncias, entre otros, de David Ferrer, Feliciano López, Tommy Robredo y Fernando Verdasco. Nicolás Almagro se encuentra lesionado después de ser operado de una fascitis plantar en el mes de junio.

En los Juegos, sí

Pese a la falta de compromiso de la mayoría para representar a España en la Davis, Moyá no quiso sin embargo ahondar en la polémica. «No me gusta personalizar. Son jugadores que han dado todo por este país. Hay que ir más allá de las simples no disponibilidades. Cuando es uno o dos jugadores los que fallan puede ser un problema del jugador, pero cuando son ocho, nueve e incluso diez los que no se declaran disponibles, se entiende que es algo más allá de ellos, que alcanza a una competición que no ha evolucionado y no tiene el interés de hace años», insistió este jueves el sustituto de Álex Corretja.

«En 2016 hay Juegos y alguno me dijo que ahí sí le apetecería jugar y estaría disponible. No puedo poner a un jugador de este nivel entre la espada y la pared. Tampoco le voy a poner una pistola para que vaya a Brasil», añadió. Para ocupar su puesto, el principal aspirante es Juan Carlos Ferrero, que ya expresó su deseo de ser seleccionador español. «Ha compartido muchos momentos con los jugadores actuales y se ha enfrentado a ellos y eso es una ventaja», subrayó Moyá, quien también presenta una apuesta de futuro: «Para dentro de unos años Marc López va a ser un grandísimo capitán».