Escañuela se va, Gala León se queda

Fernando Fernández-Ladreda, hasta ahora vicepresidente primero de la Federación, asumió este jueves temporalmente el cargo de Escañuela y aseguró que su principal objetivo será «recuperar la normalidad» institucional y deportiva perdida. Eso sí. Es una dimisión de Escañuela con una condición: se hará efectiva el 19 de julio, para que Gala León puede sentarse como capitana en la eliminatoria de Copa Davis que enfrentará a España con Rusia a partir del día 17. «Me voy el 19 porque tengo que asumir la responsabilidad de lo que ocurra en la Copa Davis», reconoció Escañuela en Radio Marca. Y esa responsabilidad pasa, según él, por mantener el apoyo a Gala León a pesar de la oposición de los jugadores. «Gala León tiene una convicción absolutamente firme de que se sentará en el banquillo contra Rusia», reconoció el ya expresidente, que insistió en que las críticas a la capitana se tratan de «ataques contra la igualdad».

Lo único cierto es que, a pesar de su dimisión no aceptada, Gala León se va a sentar como capitana rodeada de jugadores desconocidos para el público: Gimeno-Traver, Adrián Menéndez, Íñigo Cervantes y David Marrero serán los encargados de ganar la eliminatoria. Gala León tiene como muy tarde hasta el 7 de julio para confirmar el equipo. Es más. Escañuela cree que su suspensión viene a raíz de apostar por ella como capitana: «A partir del nombramiento de Gala León empieza toda esta basura y esta difamación». Escañuela, en el cargo desde 2009, se refiere a la suspensión que le impuso el TAD. Castigo que le aplicó este tribunal, dependiente del CSD, en medio de la guerra entre el organismo comandado por Miguel Cardenal y la FET. Una batalla que finalmente ha ganado el secretario de Estado para el Deporte, que envió la semana pasada a funcionarios del CSD a que registrasen la sede federativa, donde localizaron sin firmar el acta de la elección de Gala León como capitana.

También se le acusa a Escañuela de no haber justificado más de 700.000 euros destinados a la Fundación del Tenis y al Observatorio del Tenis. Según La Voz de Galicia, empleó 12.000 euros en comprar caramelos o 238.000 euros en partidas superfluas como viajes, abogados, periodistas o relaciones públicas.

Otro de los los actos más estrambóticos es la falsificación de la firma de Rafa Nadal para una subasta benéfica de una camiseta suya. Precisamente, de los tenistas habló también el expresidente de la FET, que presumió de ser «muy amigo de muchos de los jugadores», los mismos que emitieron un comunicado el domingo pidiendo su cabeza. Ya la tienen.