Primer triunfo de la extraña pareja

La imagen de ambos juntos y también de rojo lleva la mente hasta la feria de San Mateo del 2019. Ambos se proclamaron campeones ante Altuna e Imaz (otro intercambio de cromos entre empresas). Pero San Mateo es una feria, enorme, pero una feria. Diferente es un torneo. Lo cierto es que emparejar a ambos es una de las dos grandes apuesta de Baiko (la otra es Urrutikoetxea e Imaz), que necesita sacudirse el dominio que está ejerciendo Aspe.

El partido tuvo un inicio revelador, después de que Olaizola y Rezusta abriesen una primera brecha de seis tantos (6-0). Aranguren quizá acusó el partido y entregó tres pelotas. Ahora bien, Rezusta tampoco parecía sentirse cómodo, por lo que era Olaizola el que tomaba la voz cantante, como otras tantas veces. A los trece errores de sus rivales, el navarro sumó ocho tantos.

Reaccionaron Artola y Aranguren a la primera sacudida y se colocaron a un tanto (8-7), antes de un toque de atención de quienes mandaban (11-7). Era un aviso de lo que se avecinaba. Errores y aciertos. El marcador corrió demasiado y, de repente, señalaba un 19-10 casi imposible de levantar. Así fue. Olaizola necesitó poco para alcanzar el cartón veintidós y permitir pensar que está pareja tiene un largo recorrido.

En el otro partido, el riojano Pedro Ruiz perdió junto a Egiguren por 8-22 frente a Salaberria y Oier Etxebarria.