Darío y Zabala miman sus manos

Y se da la circunstancia de que ambos delantero, los dos de la empresa Aspe, se encuentran en un periodo de recuperación. Tanto el de Ezcaray como el de Logroño tienen puestas muchas esperanzas en este torneo y han suspendido temporalmente su presencia en los festivales para preparar la exigente modalidad, tanto física como mentalmente, y para recuperar sus manos, muy maltrechas tras el Campeonato de Parejas Serie B.

Darío finalizó en tercera posición la edición del 2023 por lo que el año pasado fue cabeza de serie de la rama de Aspe. Arrancó el torneo con una victoria ante Zabaleta (17-22) para caer luego ante Laso (11-22) y Altuna (22-19).

En esta edición Darío Gómez intentará colarse en la liguilla de cuartos en una distancia en la que el pelaire se maneja a la perfección. En la actualidad Darío lleva dos semanas apartado de las programaciones de Aspe. Su última aparición fue una victoria, en Tolosa, el martes 4 de marzo, Carnavales de Tolosa.

«Hasta la semana pasada estaba con dudas pero el sábado hice un entrenamiento que acabé con muy buenas sensaciones», asegura el de Ezcaray. Darío continúa su preparación con entrenamientos específicos a todo el frontón. «Hoy (por ayer) he hecho un entrenamiento de mano a mano en Idiazábal, con la empresa, y ha ido muy bien. Así que ya estamos en marcha», remata el riojano.

Por su parte, Javier Zabala fue el pelotari revelación de la pasada edición. Venció a Urrutikoetxea en octavos (14-22) para entrar en la liguilla de cuartos y clasificarse para la semifinal tras ganar a Ezkurdia (11-22) y caer ante Elordi (20-22) y Artola (22-8). En la semifinal disputada en el Labrit cayó ante Laso (22-12) y luego no pudo pelear en la final de consolación por problemas físicos.

Esta circunstancia hace que el delantero de Logroño sea, junto al vigente campeón Altuna, cabeza de serie de la rama de Aspe lo que le permite comenzar el torneo directamente en la liguilla de cuartos de final.

Desde el lunes 3 de marzo Zabala no aparece en las carteleras y se encuentra en pleno proceso de recuperación. «Unos días de descanso no vienen mal. Estoy aprovechando para meter mucho gimnasio», reconoce Zabala.

El logroñés estuvo ayer en Mauleón (Francia) para recibir un masaje en las manos. ¿Peligra su participación en el Manomanista? «¿Peligro? No, no. Queda mucho. Este jueves hago entrenamiento con tacos para darle a la pelota. De momento estoy dándole con la pelota blanda para hinchar las manos», concreta.