Muchas luces y una única sombra

Darío se despide el Manomanista tras haber ganado a Aranguren, en la primera ronda, y a Peio Etxeberria, Joseba Ezkurdia, finalista en el 2022, y Erik Jaka, campeón de este torneo hace no muchos años. Y la derrota ante Elordi. Ha sumado 103 tantos y ha encajado 65.

Esas cuatro victorias han sido diferentes. A Aranguren le dominó de principio a fin en Ezcaray. Su partido más rápido, 40 minutos y tan solo 28 pelotazos. Después de un inicio igualado, el pelaire firmó una tacada de 10-0 para alcanzar el 22-6.

Su compromiso contra Peio Etxeberria resultó el más complicado. El navarro es un jugador al que hay que ganarle cada pelotazo. Darío se ha encontrado mejor con el pelotazo y más incómodo cerca del frontis. Le ha costado más acabar el tanto. Mandó en el marcador con ventajas tales como 15-9, pero cuando su adversario le enredó en los cuadros alegres sufrió hasta verse con un inquietante 19-18. Al final, venció por 22-19 en el que era su primer partido de la liguilla de cuartos de final. Por delante tenía dos compromisos para ganar uno de ellos.

Pocos apostarían por una victoria tan clara como la que logró el pelaire sobre Joseba Ezkurdia, subcampeón de la distancia. 10-22 en 46 minutos y tan solo 248 pelotazos. Aquel triunfo supuso la clasificación para semifinales y dejar su tercer partido, contra Jaka, en un mero trámite. Después de un 6-4 favorable al navarro, Darío tomó la delantera y tras el 6-9 se marchó con firmeza hacia el éxito. Ganó 14 tantos, pero sobre todo cometió muy pocos errores, 4.

El compromiso contra Erik Jaka, campeón del Manomanista en el año 2020, aquel en el que el pelaire fue semifinalista, no alteraba nada. Aun así, venció el riojano por 22-18 en el Javier Adarraga. Trece tantos y seis saques cimentaron su nueva victoria, la que le permitía cerrar la liguilla con pleno de triunfos. Se marchó 4-9 en el electrónico, vio como el vasco le empataba, 9-9, y se rehizo para ganar un partido igualado, si bien siempre mandó en él a partir de ese momento.

Vitoria, 21 de mayo. La gran oportunidad del delantero de 27 años. Una nueva semifinal tras la vivida en el año 2020. Darío y Elordi solo se habían medido una vez dentro del Manomanista, en la final del Promoción del año 2019. Y venció el riojano, pero la historia no gana partidos. Y, por otro lado, los dos pelotaris han evolucionado en estos cinco años.

Su quinto partido ha supuesto su única derrota, pero letal, porque era una eliminatoria. Se quedó en quince tantos ante el vasco, que vive su mejor momento desde que es profesional, y que puede cerrar el año con doblete. El saque y el ritmo que imprimió el vizcaíno en el inicio del compromiso resultó capital, amén de lo que le costó al riojano entrar en el encuentro.