Bilbao alberga el mejor partido del verano

No han cumplido con la promesa de que fuese Logroño la sede de este encuentro. Sus motivos (económicos) tendrán, pero dejan atrás una semilla de descontento multiplicada por las salidas de Víctor, Unai Laso, Eskiroz y, ahora, Mariezkurrena. Seguirá creciendo la planta del enfado si no se toman medidas pero, mientras, tanto, el espectáculo debe continuar.

Y a la final de esta tarde no le faltan alicientes. Por lo visto en la liguilla regular y en las semifinales, Artola y Rezusta parten como favoritos. Dominan atrás con el zurdo de Vergara y, adelante, el delantero de Alegría de Oria combina a la perfección su faceta defensiva con un gran momento en el remate. Cuentan, además, con seis días de descanso que han empleado para recuperarse y entrenar.

Sus rivales, por contra, llegan con apenas 24 horas de tiempo para olvidar el esfuerzo empleado en doblegar a Olaizola y Zabaleta. A Altuna y a Imaz les costó un mundo ganar una semifinal en la que no se encontraron cómodos y sudaron sangre para cerrar tantos hasta que la magia del de Amézqueta y los errores de los veteranos les abrieron las puertas del choque de hoy.

A pesar de esas diferencias, el partido tiene el morbo de saber si Altuna podrá repetir, una vez más, sus trucos únicos, sus golpes que le colocan, a día de hoy, como el mejor pelotari del cartel profesional. También si Imaz es capaz de soportar el bombardeo de un intratable Rezusta y de si a Artola no le tiemblan las piernas en un evento antesala de un otoño caliente. En octubre se resolverá el Campeonato de Parejas que quedaba pendiente desde marzo. Sobran los alicientes para ver el partido aunque toque desde el sofá. Pero así lo han decidido Baiko y Aspe. Logroño, La Rioja y su afición espera un guiño que no llegará. La historia se repite una y otra vez.

Por otra parte, ayer en Atáun, su localidad, debutó Zubizarreta III. Brilló el delantero, junto a su vecino Albisu, para doblegar a Bengeotxea y Aranguren (13-22), con once tantos acabados por el debutante, que se fue feliz.