Altuna desvela que su lesión del hombro ha mejorado

En el peloteo previo a escoger los cueros para el partido en el que se repartirá la chapela prácticamente no golpeó la pelota con la zurda. En condiciones normales, la lesión que arrastra requiere entre cuatro y seis semanas de reposo y él no las ha tenido, por lo que cuanto mayor descanso tenga la zona dañada, mejor. «La semana pasada estuve mal».

El delantero no quiso responder a si se infiltrará de cara al duelo. «Eso son cosas que se deciden dentro. A mí no me gusta hablar de ellas», zanjó, y está convencido de que dará su nivel el domingo. «Hay veces que he llegado en un gran momento y las sensaciones no han sido nada buenas. Espero que esta vez sea al revés». Y en caso de perder, el hombro no será una excusa.

Peio Etxeberria está viviendo una situación bastante diferente en la primera final en la élite de su carrera. «Es algo especial», subrayó. El navarro ha cubierto sin problemas la ruta prevista. El de Cenoz está a lo suyo. Aunque reconoce que el de Amézqueta puede jugar con dolor, prefiere pensar que su adversario «vendrá a por todas, por que en caso contrario irá en mi contra». Va a necesitar jugar al límite, «porque Altuna III no está muerto hasta no llegar a veintidós», manifestó.

La elección de material dejó a gusto a ambos finalistas. Altuna se decantó por un par de pelotas rápidas de cuero apergaminado –105,6 y 105,9 gramos–, mientras que Etxeberria escogió una parecida y otra más blanca –105,4 y 106,2 gramos– con más bote «para que haya de todo un poco en el cestaño», señaló. El lote, separado hace tres semanas antes de que se conocieran los protagonistas del choque, fue parecido a los que se han empleado a lo largo del torneo.