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Víctor Soto
Jueves, 8 de diciembre 2016, 13:10
Cuatro clubes se repartieron los cuatro títulos que se disputaban ayer en el frontón Adarraga. Las finales del Campeonato de La Rioja de clubes comenzaron con el cuatro y medio juvenil. El pelotari del Titín Logroño, Pablo Martínez, mostró su superioridad ante Ibáñez (Najerino) y ... se llevó la primera chapela por un contundente 18-4.
En el segundo partido, cambiaron las tornas. Los mismos clubes finalistas, pero con distinto resultados. En esta ocasión, en la final del parejas juvenil, los najeranos Pérez y Mínguez conquistaron la copa tras derrotar a Gutiérrez y Jiménez (22-18) en un partido intenso, largo y emocionante.
Urbieta, en representación del San Cosme, venció a Garatea (Pradejón) en el cuatro y medio sénior por 18-16. El riojabajeño remontó una notable desventaja para igualar a 16. Pero cuando necesitaba más templanza, tiró una carambola sin mordiente, erró en una apertura al ancho que acabó en las tablas y vio cómo su ilusión se desintegraba tras una cortada de Urbieta. Ambos contendientes firmaron un bonito partido.
Quedaba, cuando el reloj ya marcaba las 13.30, la última final, la de mano parejas sénior. Picote y Matute IV conquistaron el campeonato regional al ganar (22-13) a Urturia y San Millán. Picote fue el más destacado de los contendientes, dejando tantos de bella factura y dominando en los cuadros delanteros, aunque muy bien respaldado por Matute, que apenas erró y demostró que la veteranía es un grado. Sobre las 14.30 se repartieron las chapelas en una mañana larga pero con bonitos partidos y que atrajo a más de 200 fieles a las gradas del recinto logroñés.
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