Irribarria o el don de la precocidad

El título de campeón manomanista cosechado a los 19 años es un récord histórico y también una nueva página en la historia de una pelota que se rejuvenece a marchas aceleradas. Rubén Beloki, el 'látigo de Burlada' sumó su primer entorchado en 1995, con 20 años. Parecía imbatible porque su debut fue extremadamente precoz. Pero, dos décadas después, su hito ya es pasado, como los logrados por los revolucionarios Irujo, García Ariño y Ogueta, campeones a los 22 años. Y es que Asegarce y Aspe cada vez dan oportunidades a los más jóvenes. En el cuadro profesional actual, 14 pelotaris no han cumplido los 22 años. Todo un detalle.

Pero el vendaval Irribarria, entre sus compañeros, ha resultado casi previsible. El ezcarayense Darío, que se ha batido el cobre en numerosas ocasiones ante el de Arama, recuerda varias anécdotas con él: «Pasó un pequeño bache, pero llevaba una evolución espectacular». «Una vez, jugó con Artola, que era dos años mayor, y le dio mucha guerra. Se veía que podía llegar alto». Otro ezcarayense, Víctor Esteban, venció a Irribarria en la final del Manomanista de Promoción del 2015, lo que le da más valor a su gesta. «Ahora, Irribarria está para jugar casi contra dos, pero desde pequeño se le han visto cualidades. Es impresionante, pero también se trata de un momento. En el Parejas sufrió problemas en la mano y no estuvo tan fino. Pero ha ido cogiendo carrerilla y, con sus cualidades, se le ha visto muy por encima de todos sus rivales».