Una nueva derrota asoma al Grafometal al descenso directo

Al final, una derrota que deja al Grafometal a solo cuatro puntos del último puesto, algo impensable a mitad de temporada. La posibilidad del descenso directo es real. No es una quimera.

Un mal inicio (2-6) condenó al equipo de Dani Berbés, que anoche se estrenaba como técnico en el Palacio, que consiguió reponerse (10-10) en una primera parte en la que Geandra no estuvo tan acertada como suele ser habitual. Un gol sobre la bocina de Andrea Loscos dejó el marcador al descanso un gol arriba para las vascas (13-14).

Berbés hizo mucha combinaciones en la primera línea de las verdeamarillas pero ninguna transmitió una gran seguridad en sus acciones.

En la segunda mitad el Grafometal salió más centrado, buscando jugadas más elaboradas. Tavares demostró la calidad que tiene y se echó el equipo a la espalda, acompañada por la mejor versión de Alba desde hace meses. Entre las dos mantuvieron al Grafometal en el partido, incluso lograron tres goles (19-16 y 20-17) de renta que llevaron la ilusión a los aficionados que ayer se acercaron al Palacio de los Deportes.

Pero volvieron a aparecer los errores. Y sobre todo la defensa riojana perdió la contundencia que ha demostrado durante la temporada. Especialmente en la zona central, donde la pivote de Zuazo hizo mucho daño a las riojanas.

Es complicado jugar los últimos minutos con la ansiedad que tiene ahora mismo el Grafometal, que vio cómo se le escapaba el partido poco a poco sin poder evitarlo. Fallos en los pases, lanzamientos de seis metros errados, rechaces de paradas que iban a las manos de las rivales. Todo lo que podía salir mal, salía mal.

De esta manera, tras el 25-27 final, Zuazo se mete de lleno en la pelea por la permanencia y mete a las riojanas en una situación muy complicada. Queda tiempo. Pero se necesita más.