Viernes de récord para Bagnaia, que se impuso a Martín y a Márquez

La segunda cita consecutiva en el circuito Marco Simoncelli de Misano comenzó con un nuevo récord de pista establecido por Pecco Bagnaia en los entrenamientos de la tarde. Nada habitual un viernes, pero algo más factible en esta jornada ya que hace solo dos semanas se disputó en esta misma pista el GP de San Marino. Y, por si fuera poco, el lunes después de aquella carrera se celebró un test oficial, con lo que los equipos llegaban con las cosas realmente claras a este inicio de gran premio.

Eso sí, el primer entrenamiento libre apenas sirvió de mucho, ya que la lluvia caída la noche anterior había empapado el trazado y, aunque se fue secando conforme avanzó la mañana, los parches de agua se mantuvieron hasta el final y se rodó casi dos segundos más lentos del tiempo óptimo. En esas difíciles condiciones, cómo no, el más rápido fue Marc Márquez, un liderato más simbólico que otra cosa, ya que no se prevé lluvia durante el resto del fin de semana.

Así que el entrenamiento que marcó la diferencia fue el de la tarde. Con unas condiciones casi perfectas y que permitió a los pilotos volar sobre el circuito de Misano. Bagnaia y Jorge Martín llevaron la voz cantante la mayor parte del entrenamiento rodando con el neumático de carrera, el medio, y en los últimos minutos, cuando todos pusieron la goma blanda, se desataron las hostilidades.

Fue un mano a mano entre los dos primeros de la general donde se impuso el italiano, con la vuelta más rápida dada nunca en el circuito de Misano (1:30.286), mejorando el tiempo de la pole que logró él mismo hace dos semanas. Lo que hace prever que este sábado se mejore aún más el tiempo y se baje, por primera vez, la barrera del 1:29.

Martín acabó a 198 milésimas del tiempo del vigente campeón de MotoGP, pero en su último intento de vuelta rápida se fue al suelo, cuando venía mejorando sus parciales ligeramente. Era su primera caída en un viernes pero, en cualquier caso, el madrileño ve a su rival un paso por delante a una vuelta, pero no entrega la pole todavía: «En el 'time attack' le veo un pelín más fuerte que yo, pero he cerrado la brecha respecto a hace dos fines de semana. Así que, si alguien puede batirle, seremos Marc o yo».

Aunque Martín metía al de Cervera en la terna de candidatos a la pole del sábado, Márquez había sido sensiblemente más lento que sus rivales este viernes, tanto en ritmo de carrera como en velocidad pura a una vuelta. De hecho, el catalán confirmaba que, si la carrera fuera ya, no estaría para luchar por la victoria: «Hay dos pilotos en pista, Bagnaia y Martín, que van muy, muy rápido y que han puesto el listón muy alto. Ahora mismo intentar ir con ellos sería un suicidio, porque nos caeríamos. Intentaremos seguir trabajando, viendo cómo va evolucionando la pista ya ver si podemos estar un poquito más cerca».

En un viernes con muchas caídas (ocho solo en el entrenamiento de la tarde), Márquez no besó el suelo y eso ya es noticia para alguien que acostumbra a buscar los límites los viernes. De momento, el ganador de los dos últimos grandes premios estuvo con los mejores, superando a las otras dos Ducati 2024, de Enea Bastianini, cuarto, y de Franco Morbidelli, sexto.

Otra de las sorpresas del vienes la protagonizó Fabio Quartararo, con una quinta posición muy meritoria con la Yamaha que le permite clasificarse para la Q2 del sábado. También lograron su billete directo para la calificación definitiva: Marco Bezzecchi, séptimo, y otros tres españoles que cerraron el top 10: Maverick Viñales, Pedro Acosta y Aleix Esparagaró.

En cuanto a las categorías pequeñas, Tony Arbolino lideró la primera jornada de entrenamientos de Moto2 por delante del valenciano Arón Canet. Mientras que en Moto3, el más rápido del día fue el madrileño Adrián Fernández, que encabezó el triplete español en la parte alta de la clasificación, junto a Dani Holgado y Ángel Piqueras.

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