Martín y Viñales se retan en el rancho de Márquez

Como es habitual el primer día gran premio, en los últimos minutos del entrenamiento de la tarde todos los pilotos buscaron una vuelta rápida para acabar entre los diez primeros y asegurarse así su presencia directa en la Q2 del sábado. Martín solo necesitó un intento para destrozar el crono y ganarse su plaza en la 'qualy' definitiva. Su tiempo, 2'01.397, suponía rebajar el récord absoluto del circuito en casi medio segundo, con un trazado recién asfaltado en algunas zonas que puso de su parte. Pero el de San Sebastián de los Reyes no necesitó ya gastar otro juego de neumáticos nuevo porque sabía que ese registro le bastaba.

Parecía que el tiempo de Martín era inalcanzable hasta que apareció el propio Viñales, que en su último intento se quedó a escasas 76 milésimas del nuevo récord, demostrando también su fortaleza a una vuelta y presentando su candidatura a la pole del sábado. Y es que, si algo había dejado claro el viernes era que los dos hombres fuertes en Austin eran Martín y Viñales.

Pero esto es Texas y hasta hace no tanto este circuito tenía un 'sheriff' en la figura de Marc Márquez, que entre 2013 y 2021 no dejó ni las migas. El de Cervera se tomó el primer día de entrenamientos con cautela. Por la mañana terminaba octavo y por la tarde apuró hasta el último segundo para marcar su mejor tiempo y concluir la jornada en tercera posición. Eso sí, a más de cuatro décimas del crono de Martín. De momento, Márquez está para pelear por ese ansiado podio de domingo con el bicampeón Pecco Bagnaia, cuarto este viernes, con un registro casi calcado al de Marc.

En una pista donde dominaron con autoridad las Ducati, colando a siete de sus ocho máquinas entre los diez primeros; y en el que la única alternativa real parece que son las Aprilia (Aleix Espargaró finalizó sexto), se coló en la parte alta de la clasificación el 'rookie' Pedro Acosta, que ya no sorprende a nadie. El murciano estuvo muy vivo en los instantes finales de la sesión y buscó la rueda de Bagnaia, para lograr el quinto mejor tiempo del día y ser la única KTM que ya se ha ganado su plaza en la Q2. En un circuito tan difícil y diferente a todos como el de Austin, el de Mazarrón demostró que está hecho de otra pasta y que se puede volver a soñar con el podio como el que ya pescó en Portimao.

Fuera del 'top 10' que daba acceso directo a la Q2 se quedaron las Aprilia satélite de Miguel Oliveria y Raúl Fernández, que corren en casa ya que su equipo, el Trackhouse Racing, es el único estadounidense de la categoría. Y también Álex Márquez, 13º, que sufrió una caída por la mañana y al que se le cruzó el inicio de este gran premio de Las Américas.

El pequeño de los Márquez será la única Ducati presente en la repesca de la Q1, donde tratará de lograr los dos billetes para la Q2 contra las KTM de Brad Binder, segundo clasificado en el campeonato, o Jack Miller. Por su parte, las fábricas japonesas volvieron a decepcionar, cerrando la tabla de tiempos del viernes: Quartararo y Rins (17º y 18º con la Yamaha) y Johann Zarco, Joan Mir, Luca Marini y Takaaki Nakagami, los cuatro últimos con las Honda.

Primera jornada también para las categorías pequeñas del mundial donde también hubo mucho protagonismo español. En Moto3 el más rápido fue el hispano colombiano David Alonso, por delante de José Antonio Rueda, Ángel Piqueras, el líder Dani Holgado e Iván Ortolá. Mientas que en Moto2, dominio absoluto de Fermín Aldeguer, con récord del circuito incluido, y segundo terminó Sergio García. El líder, Arón Canet, solo pudo ser décimo tras sufrir una caída en los últimos instantes de sesión cuando buscaba el tiempo con neumático nuevo.