Márquez se apunta a la fiesta en Aragón

Sin embargo, Márquez rebajaba la euforia cuando se bajaba de la moto, manteniendo su discurso conservador con el que aterrizó en Aragón. El jueves dijo en rueda de prensa que sus posibilidades de estar en el podio eran de un 1%. Una vez completado el primer día de entrenamientos su predicción era similar: «Las posibilidades siguen siendo las mismas. El podio está muy lejos y hay muchos pilotos que van más rápidos. Pero ese tampoco es mi objetivo. Para mí hacer algo grande sería acabar la carrera en buena forma y no estando muy lejos de los cinco primeros». Unas declaraciones que, por supuesto, ninguno de sus rivales se cree, porque a nadie en el paddock le ha sorprendido este resultado.

Es cierto que Márquez todavía está en esa fase de reconocimiento de su físico. En este primer día de entrenamientos se encontró mucho mejor por la tarde que por la mañana, cuando se sentía más agarrotado encima de su Honda y le costó más encontrar sensaciones. Lo bueno para él es que por la tarde se disputan las clasificaciones del sábado y la carrera del domingo. De momento, le cuesta menos conseguir un tiempo rápido a una vuelta, que mantener un ritmo constante en carrera. No ha dado más de cinco vueltas seguidas en entrenamientos y el domingo deberá afrontar 23, así que el objetivo número uno es acabar la carrera y si para ello tiene que aflojar el ritmo para que el físico sufra menos, lo hará. Márquez es consciente de que cuando el domingo se apague el semáforo será un salto al vacío: «Es una incógnita cómo aguantaré las 23 vueltas, pero aquí he venido a competir!». Y, de momento, está cumpliendo.

La jornada inaugural del Gran Premio de Aragón tuvo dominio español. Jorge Martín marcó el mejor tiempo del día y por primera lideraba un viernes, algo que no había conseguido en sus dos temporadas en MotoGP. La primera posición del piloto madrileño permitió que Ducati mantuviera ese estado de gracia en el que la fábrica italiana lleva meses instalado. Segundo terminó el líder del campeonato, Fabio Quartararo, que como es habitual este año se vio rodeado de motos rojas. Y es que detrás de él finalizaron Zarco, Bastianini y su principal rival por el título, Pecco Bagnaia.

Luces y sombras para el estreno de Aleix Espargaró en Aragón. El catalán lograba el tiempo más rápido en el FP1 de la mañana, a pesar de una caída. En el FP2 de la tarde se iba de nuevo al suelo y ya no era capaz de mejorar su 13ª posición. Lo positivo es que ninguna de las dos caídas tuvo consecuencias físicas, y que su resultado está muy lejos de su verdadero nivel en el trazado alcañizano. En esta pista consiguió en 2014 su primer podio en MotoGP y siempre se ha mostrado muy competitivo, así que su objetivo sigue siendo luchar por la victoria y recortar puntos a Quartararo.

Los españoles también fueron protagonistas en las categorías pequeñas. Especialmente en Moto2, donde coparon las tres primeras posiciones. El valenciano Arón Canet fue el más rápido del día, segundo puesto para Augusto Fernández, que anunció su salto a MotoGP en 2023, y el tercero de Alonso López. Y en Moto3, el mejor tiempo correspondió al italiano Dennis Foggia, por delante de Ayumu Sasaki y del joven piloto valenciano Dani Holgado.