Pedrosa y Honda apuestan por lo conocido

Los dos han decidido pisar terreno seguro, la fábrica asegurándose un piloto que da resultados y que hace buena pareja con Márquez «Su experiencia es muy importante para ayudar a los mecánicos a desarrollar nuestra moto», apunta Shuhei Nakamoto, máximo responsable de HRC en el Mundial-, el piloto un sitio conocido en el que tiene menos que arriesgar. «Quiero agradecer a Honda la confianza que me han demostrado renovando conmigo por dos temporadas más», afirmaba Pedrosa en el comunicado oficial que este lunes ha anunciado su renovación. «Creo que es lo mejor para mí seguir en la compañía con la que piloté en mi primera carrera. Por suerte, las negociaciones han sido rápidas y ahora puedo concentrarme únicamente en la competición».

Además, la marca japonesa adelanta en el terreno del marketing a su rival Yamaha, que anunciará la llegada de Maverick Viñales sin emoción alguna en una noticia en la que ya ni siquiera el cuándo va a generar expectación.

Este próximo jueves, a mediodía, Suzuki comunicará que Viñales ha decidido no seguir con ellos; un rato después Yamaha corroborará el fichaje de Viñales; a las cinco de la tarde, en la rueda de prensa oficial en Mugello previa al inicio del Gran Premio de Italia, el piloto de Roses se sentará frente a los medios. A su lado, Valentino Rossi. El escenario perfecto para alabar a su actual estructura, para dar lógica a la elección de una de las dos motos que en estos momentos son ganadoras sin dudas y para recibir los halagos de su futuro compañero de equipo. Algo que, por otra parte, Rossi ha venido haciendo en las últimas semanas.

A la renovación de Pedrosa le seguirá la evidente de Marc Márquez -Márquez debutó en 125cc en el Mundial en abril de 2008, Pedrosa con la MotoGP de Honda en marzo de 2006...-. Con esto tanto Honda como Yamaha habrán cerrado sus parejas. Ducati tiene a Lorenzo y comunicará tras Mugello con cuál de los dos Andrea -Iannone o Dovizioso, este último mucho más del agrado de Gigi DallIgna, máximo responsable de la marca italiana- se queda.

El cuarto equipo de fábrica -descontando la aún poco competitiva Aprilia y dejando de lado KTM, que aún no ha debutado-, Suzuki, tendrá ahora que mover sus fichas. El ideal para los promotores del campeonato era el de tener a Lorenzo, Rossi y Márquez cada uno en una fábrica distinta -y así será- y que en Suzuki no cundiese el desánimo por la pérdida de una de las mayores promesas del campeonato.

Algo que no se va a poder cuadrar con la marcha de Viñales. Suzuki ya dejó una vez MotoGP y la pérdida de uno de los pilotos que se colocan en el top de la categoría aunque esto aún lo tiene que demostrar con resultados- se entendía como un desincentivo en su nuevo y ambicioso proyecto. En Italia colocan a Iannone como uno de los posibles inquilinos de una de las dos motos japonesas. Para la otra suena otro de los talentos del Mundial, Alex Rins. El líder de Moto2 está siendo muy claro sobre su futuro: quiere subir a MotoGP en 2017 y lo quiere hacer en una fábrica. Esa combinación solo sería posible, visto lo visto, si cubre el hueco de Viñales. Aunque, de momento, Aleix Espargaró sigue peleando por renovar con una marca que ha conseguido en poco tiempo convertirse en un lugar apetecible para las estrellas de la clase reina. Eso sí, no para aquellas que a día de hoy se entienden que tienen que estar peleando por las victorias y los campeonatos.