Un nuevo peligro para Alonso, resurge Mercedes

Era lo que todos temían, pero no ha pillado por sorpresa a nadie. «No han sido siete veces campeones del mundo por nada», admitía Christian Horner, jefe de Red Bull, tras la carrera en la que Max Verstappen arrasó de principio a fin. Él, de momento, se mantiene tranquilo porque sabe que la superioridad de la que gozan el bicampeón y su equipo es sobrada. Tal es así que este fin de semana, mientras le hablaban por la radio, Verstappen reconoció que sonaba un teléfono móvil y que este era el de Helmut Marko.

El mayor problema lo tienen ahora en Aston Martin. Por experiencia de años pasados, era razonablemente previsible que el equipo de Silverstone sufriera en la primera oleada de evoluciones, prevista como siempre para el Gran Premio de España aunque este año se disputase más tarde. La labor de los ingenieros y mecánicos de Aston Martin fue más que decente de inicio, pero ahora tienen que dar un extra para seguir el paso a sus rivales. Lo advertía Alonso tras su peor resultado de lo que va de año: tienen que comprobar qué ha pasado para que Mercedes les saque semejante ventaja en ritmo de carrera.

Mientras tanto, Toto Wolff y su gente sonríen. La decisión arriesgada de renunciar a su concepto 'tamaño cero' en sus pontones ha demostrado una gran audacia, en el sentido en el que ha sido aceptar que habían errado en su primera idea. Han tardado un año en afinar, pero lo han logrado… salvo que lo visto en Montmeló sea un espejismo. No tiene pinta.

La gestión de este pequeño bache será clave para el futuro inmediato en Aston Martin. Después de la cita de España han perdido la segunda posición de la general, toda vez que Mercedes tiene una ventaja sobre ellos: cuentan con dos pilotos. Lance Stroll logró el sexto puesto gracias a que Alonso no quiso ni siquiera intentar adelantarle, algo que no habla muy bien de sus capacidades. De hecho, el canadiense está cuajando una campaña notablemente inferior a la de su compañero pese a contar con todas las ventajas que cuenta, desde ser el hijo del dueño hasta tener más conocimiento del propio equipo.

Aunque el de España no fue el resultado esperado y el 'sorpasso' de Mercedes ha supuesto un golpe de realidad para los de Aston Martin, hay que ver el resultado en su justo contexto. Como Alonso apuntaba tras la carrera, todo viene de una clasificación en la que se vieron lastrados por un problema en el fondo del monoplaza que tantas alegrías está dándole a la afición española.

«En realidad todo viene de la clasificación del sábado, que fue nuestro punto débil todo el fin de semana. Saliendo tan atrás puedes remontar, pero hasta cierto punto. Tanto Russell como Checo eran más rápidos, así que no había mucho que hacer, pero saliendo delante junto a Hamilton, cosa que podría haber hecho sin lo del suelo roto, habría sido otra historia», analizaba.

Más allá de las circunstancias individuales de este fin de semana concreto, la realidad es la que ya se barruntaba unos meses atrás: ahora que Mercedes ha dado un paso adelante, y eso es mala noticia para Aston Martin… pero buena para el espectáculo. Que Hamilton se convierta en un candidato a victoria supone que tarde o temprano va a estar luchando codo con codo con Fernando Alonso por, al menos, podios. Una gran noticia para el espectáculo, ya que donde no lleguen las luchas por la victoria por estar en poder de Max Verstappen de manera dictatorial, ahí estarán los viejos compañeros y rivales para dejar a los espectadores pegados a sus asientos. Porque, si finalmente llega, ¿qué mejor relato que el de la 33 de Alonso imponiéndose al mismísimo Lewis Hamilton?