Secciones
Servicios
Destacamos
David sánchez de castro
Madrid
Domingo, 28 de marzo 2021, 16:49
Si las 22 carreras de la temporada 2021 de Fórmula 1 que faltan van a ser tan emocionantes como el GP de Baréin, la afición tiene motivos para estar contenta. Por primera vez en mucho tiempo, Lewis Hamilton sudó tinta para llevarse ... una victoria que no estuvo en su mano hasta los metros finales, y con polémica. Max Verstappen, el gran agitador de esta disciplina y que promete batalla siempre que pisa un circuito, tuvo en su mano ganar el primer gran premio del año, de no ser por una inconsistente norma de la FIA.
Durante todo el fin de semana, la polémica cuarta curva del circuito había sido objeto de debate entre pilotos y comisarios. En todos los circuitos está prohibido pasarse de la línea blanca que delimita el asfalto de la escapatoria con las cuatro ruedas, pero en este trazado y en ese punto en concreto se permitió hacerlo. en carrera. No así el viernes en los ensayos ni el sábado en la clasificación, so pena de quitarles los tiempos a los que lo hicieran, pero en carrera se permitía. Así estaba escrito. hasta mitad de la carrera.
Cuando Verstappen pasó a Hamilton (que se había saltado ese punto en infinidad de ocasiones) en esa curva por fuera a falta de apenas dos vueltas para el final, Red Bull recibió una llamada de los comisarios advirtiéndoles de que si el neerlandés no devolvía la posición, sería castigado. Los ingenieros llamaron a Verstappen, que devolvió plaza y se tuvo que conformar con el segundo puesto. Un final que dará mucho de qué hablar en las tres semanas que quedan hasta la próxima carrera, como tantas otras cosas que ocurrieron en el GP de Baréin.
La cita inaugural del campeonato no defraudó ni en la vuelta de formación. Sergio Pérez, en su debut con Red Bull, se quedó tirado sin batería, que le habían cambiado apenas una hora antes, lo que le obligó a salir desde boxes. En la salida, Nikita Mazepin demostró que va a ser candidato al piloto 'Cepo del año', ya que es complicado tener un accidente más absurdo que estrellarse él solo en la segunda curva sin que nadie le toque. Fueron los dos primeros incidentes, pero no los últimos.
Y en esas estuvo Fernando Alonso. El asturiano volvió a la F1 con hambre, como demostró su gran arrancada marca de la casa que le permitió ganar dos posiciones de inicio. Después, peleando rueda a rueda con Sebastian Vettel y Carlos Sainz, demostró que aún tiene redaños. Incluso pese a que el Alpine A521 tiene serias dificultades para batirse el cobre con otros coches, dado que adolece de una preocupante falta de potencia. Pese a ello, el asturiano se estaba divirtiendo y todo iba relativamente bien hasta que empezó a ir relativamente mal.
Tras esa lucha con su viejo rival por campeonatos y su buen amigo, a Alonso le empezó a costar Dios y ayuda mantenerse en pista. Kimi Räikkönen, Lance Stroll o el propio Sainz le pasaron sin apenas dificultad, toda vez que se le veía demasiado nervioso al entrar en las curvas. Algo no estaba bien en esos frenos, pero Alonso resistía. hasta que le llamaron. Los sensores habían detectado un preocupante sobrecalentamiento en los frenos traseros, que posteriormente confirmaron: había entrado suciedad en esos conductos y se tupieron. Ante un eventual fallo catastrófico que le dejara sin frenos, le pidieron abandonar. La cara de Alonso era un poema, sobre todo porque, como admitió después, se estaba divirtiendo.
Noticia Relacionada
El problema es que el Alpine no solo tuvo esos problemas en los frenos. Las baterías, la pura velocidad o el rendimiento en recta o en las luchas dejaron mucho que desear. Alonso abandonó, pero Esteban Ocon tampoco pudo hacer mucho más que acabar decimotercero y puede dar gracias, ya que Vettel le embistió por detrás y salió razonablemente indemne.
La primera carrera de Carlos Sainz en Ferrari le salió más o menos bien. Un aprobado, sin más, dado que partía octavo y acabó. octavo. Tuvo buenas batallas, pero su objetivo no era más que acabar la carrera. Fiable, sin arriesgar y más pendiente de no pifiarla que de despuntar, ya que para ello habrá tiempo, el madrileño ya tiene sus primeros puntos con la Scuderia, que sumados a los logrados por Charles Leclerc, sexto, saben muy bien visto de dónde viene Ferrari.
Ahora tocan unas pequeñas vacaciones, ya que no habrá F1 en los dos próximos fines de semana. Imola, el legendario Enzo e Dino Ferrari, será el próximo escenario de un gran premio. Ahí habrá muchas miradas puestas en el madrileño. Se espera mucho de él.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.