Secciones
Servicios
Destacamos
DAVID SÁNCHEZ DE CASTRO
MADRID
Lunes, 18 de noviembre 2019, 17:30
La temporada 2019 de Fórmula 1 comenzó con una sensación de optimismo contenido en McLaren. Dos pilotos nuevos en el equipo, la entrada de un jefe que no iba a llegar hasta mayo, un nuevo director técnico… La revolución en Woking había pasado su ... tamiz desde los cimientos hasta el tejado, por lo que nadie tenía claro qué podía pasar. Veinte carreras después, el equipo ha atado una impensable cuarta posición en el Mundial de constructores.
Una buena cuota de responsabilidad la tiene Carlos Sainz. El piloto que le ha dado el primer podio desde 2014 es también el que ha sumado 95 de esos 140 puntos, lo que supone casi siete de cada diez obtenidos. No es sólo por el tercer puesto que sumó tras horas de espera en el box, como un padre que espera el parto de su primer hijo, sino por haber maximizado sus opciones cuando la suerte y la mecánica se lo permitían. Sainz ha exprimido el MCL34 en cada Gran Premio, con resultados muy por encima de los que por prestaciones puras podría. El coche que pilotan él y Lando Norris, cuya primera campaña en F1 está siendo notable pero no sobresaliente, ha sido más veces el sexto monoplaza de la parrilla que el cuarto, como acabará 2019.
Todos los responsables de McLaren sitúan a Carlos Sainz como un factor clave para entender su mejoría. «En ciertas cosas recuerda a Fernando Alonso», asegura un ingeniero del equipo que ha pasado por el desierto de los años de Honda y ahora bebe del maná de los buenos resultados. Metódico, serio en el trabajo pero con mucha más hambre por la previsión de éxitos, Sainz no sólo se ha ganado el respeto de sus compañeros técnicos, sino también el cariño. El podio del madrileño fue celebrado por todos los componentes de McLaren, empezando por el propio Norris, que tiene en su compañero no sólo un ejemplo, sino también un amigo.
Otro ingeniero del equipo, el aerodinamicista español Iván Roldán, se acordaba también de los aficionados. «Por aquellos que se levantaban a media noche para ver a nuestros coches retirase. Por aquelos que nos vieron luchar por no ser últimos. Por aquellos que tuvieron una decepción tras otra. Sin vosotros, no seríamos quienes somos», escribió en Twitter, en un mensaje que ha calado hondo entre los fans de McLaren en particular y de la Fórmula 1 en general.
Romper la barrera de los podios era un logro necesario para romper el siguiente objetivo: la victoria. Esa es harina de otro costal. La última vez que un piloto de McLaren celebró una carrera desde el primer puesto fue precisamente en Brasil, cuando Lewis Hamilton aún defendía sus colores, Sebastian Vettel conseguía su tercer mundial (ese trompo del que salió medio indemne en la primera curva…) sobre un impotente Fernando Alonso y el propio Carlos Sainz aún estaba abriéndose paso por los vericuetos del automovilismo hacia la Fórmula 1.
Más información
DAVID SÁNCHEZ DE CASTRO
DAVID SÁNCHEZ DE CASTRO
Ganar es un objetivo, a día de hoy, irreal. Lo imposible deja de serlo cuando se consigue, y si Sainz fue capaz de remontar 17 posiciones (sólo Vettel ha conseguido semejante gesta este año, cuando salió último y fue segundo en Alemania), nadie duda de que el siguiente paso a dar es pelear por llevase alguna carrera.
La creación del MCL35 ya ha dado comienzo. La última temporada antes de la gran revolución de 2021 es una oportunidad de oro para que McLaren confirme que vuelve a estar en posición de volver a ser grande. Todo lo que crezca Sainz lo hará McLaren y pocos dudan de que el podio de Brasil es el primero de muchos para el madrileño. Seguro que los próximos los celebrará como debe, en el cajón junto a los otros dos pilotos a los que le toque bañarse en champán.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.