Carlos Sainz se burla del destino
El piloto madrileño comenzó el año despedido por Ferrari y le atacó una apendicitis, pero ya lleva una victoria y un podio
David Sánchez de Castro
Lunes, 25 de marzo 2024, 11:24
Secciones
Servicios
Destacamos
David Sánchez de Castro
Lunes, 25 de marzo 2024, 11:24
«Las vueltas que da la vida, el destino se burla de ti». Esta frase pertenece a una de las canciones del rock español más populares de las últimas décadas, 'Dolores se llamaba Lola', de los orensanos Los Suaves. Y, precisamente, el dolor es lo ... que más ha tenido Carlos Sainz antes de darle la vuelta a su vida y ser él quien se burle del destino.
Pase lo que pase en 2025, a Sainz no se le va a olvidar el primer trimestre de 2024 en su vida. No deja de ser irónico que cada piedra que le pongan en el camino suponga prácticamente el fin para cualquier otro, pero no para él. Es como si las usara para tomar impulso y demostrar que, lejos de amedrentarse, se crece. Es como aquellos soldados en Breda que retrató Velázquez en la inmortal 'Las Lanzas': ni el barro, ni las balas, ni los herejes neerlandeses van a evitar que tarde o temprano se reivindique como el que más.
Cualquier jefe de equipo sabe que Sainz es un valor muy a tener en cuenta para su escudería. Sería absurdo no hacerlo. ¿Quién quiere tener a Sergio Pérez, que es incapaz de oler el podio el día que su compañero (mismo coche) rompe? ¿O a Lance Stroll, que sin su padre detrás sería sabe Dios qué, pero desde luego no piloto? Muestra de ello, un botón: Christian Horner, jefe de Red Bull, admitió que lo tendrá muy en cuenta. «Basándonos en una actuación como esa, no se puede descartar ninguna posibilidad. La carrera la ha ganado un piloto desempleado, por lo que el mercado es razonablemente fluido», dijo el dirigente británico que, si sigue en el equipo campeón en 2025 -aún no se ha acabado de resolver su 'affaire' sobre el presunto acoso a su asistente personal-, pondrá la candidatura de Sainz encima de la mesa… o al menos intentará que la de Pérez no esté.
Noticia relacionada
El propio Sainz es consciente de que no le está siendo propicio el año. Lejos de hundirse, como le pasaría a cualquier otro, él intenta sacar el carácter y tiene un ejemplo perfecto en su padre. El tetracampeón del Dakar estuvo muy cerca de ver cómo su trayectoria en los raids se iba al traste después de su contrato con Volkswagen y, de hecho, se perdió la edición de 2012. Tuvo que dar dos pasos atrás, correr con un buggy prestado por Nasser Al-Attiyah y, tras dos ediciones fuera de la órbita de los favoritos, se incorporó a la estructura de Peugeot para luego encarrillar de nuevo sus éxitos con los franceses, luego Mini y, por último, Audi. De aquellas, a Sainz padre también le pintaban bastos, pero él apretó los dientes y dejó claro que no le iban a retirar, sino que sería él quien decidiera cuál y cómo iba a resolverse su destino.
Quien haya sufrido una operación de apendicitis sabe bien que, en el momento del ataque y después de la intervención, el dolor es muy intenso. Tanto antes como después es necesaria la calma y un reposo más o menos absoluto, algo que choca frontalmente con el estrés físico al que se somete cualquier piloto de Fórmula 1. Por eso, la foto que Carlos Sainz compartió en las redes sociales junto a su buen amigo Lando Norris es una manera de burlarse también de este golpe que le tenía preparada la fortuna.
Aun así, la del GP de Australia no fue una carrera fácil. La alegría que supuso la carrera ganada en Melbourne le permitió que las molestias remitiesen un poco, si bien sus movimientos no eran, ni mucho menos, tan ágiles como en otras ocasiones. Andaba despacio, con las piernas ligeramente arqueadas y al sentarse no lo hacía de manera natural. «Obviamente estaba un poco tieso», admitía sobre su situación física después de la carrera.
Pero una vez superado el trance de estas dos semanas, todo apunta a que en la siguiente cita estará perfectamente. En buena medida, esto se debe a la preparación física previa a la que se ha sometido este deportista de élite, como los demás, y que le permite que la recuperación sea mucho más rápida. Muchos tienen claro que esta no será la última vez de Sainz en el podio esta temporada, y quizá pasar por quirófano y enfrentarse a las veleidades que le ha deparado el destino le haga más fuerte. Y quizá ese sea el mejor argumento para no echar de menos a Ferrari en un futuro.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.