Los atletas 'millennials' se lanzan a la conquista de Europa

Ana Peleteiro (22) en triple salto, Bruno Hortelano (26) en 200 metros, Óscar Husillos (25) en 400 metros y Saúl Ordóñez (24) y Álvaro de Arriba (24) en 800 metros son algunas de las opciones más claras de medalla en un Europeo que aspira a alcanzar las cifras de la legendaria cita celebrada en 2002 en Múnich con 15 metales. «Tenía que retirarme para que viniese gente con muchísimas ganas», bromea Ruth Beitia, jefa de equipo de una selección donde los 'millennials' han cogido el testigo.

La gallega Peleteiro viene de rozar el récord nacional de triple salto con sus 14.55 metros del campeonato de España y tiene claro que el objetivo es pelear por ganar: «La constancia no te da una medalla», dice cauta pero crecida en una temporada en la que los 14 metros han dejado de ser un misterio. Tiene la segunda mejor marca de las participantes, por delante de la israelí Minenko, que tendrá complicado defender su oro de hace dos años ante la discípula de Iván Pedroso.

Allí donde antes brillaban los 1.500 metros y el fondo, este año los aficionados tendrán que estar muy pendientes de la velocidad española. Bruno Hortelano da por superado el accidente de coche que casi se lleva por delante su carrera y está más que dispuesto a retener su título de campeón de Europa de 200 metros y bajar de los veinte segundos: «Después de haberlo perdido todo, volver a ser yo», es lo que se prometió el hombre más rápido de España después de que el coche en el que viajaba volcase hace casi dos años en una curva de la A-6.

Hortelano llega escoltado por la otra gran estrella de la velocidad española: Óscar Husillos, que con el oro fantasma del Mundial de pista cubierta llega a Berlín con la segunda mejor marca de los participantes. «Si he ganado un Mundial puedo ganar un campeonato de Europa», dice firme el de Astudillo. Los dos tienen deberes de equipo en Berlín: llevar el relevo largo español a lo más alto junto con Samu García y Lucas Búa. Los sprinters españoles miran con recelo la pista del olímpico de Berlín: este lunes todos los velocistas del hectómetro cayeron en rondas clasificatorias, lejos de las imágenes que dejó la cinta transportadora de Getafe.

Tras varias temporadas de agridulces medallas, el mediofondo español tiene una oportunidad de oro para redimirse en los 800 metros. El plusmarquista nacional Saúl Ordoñez (1:43.65) y el campeón nacional Álvaro de Arriba (1:44.99) llegan a la capital alemana con muchas posibilidades de convertir la lucha por el título de campeón de Europa en un diálogo entre españoles. El subcampeón olímpico de 110 metros vallas, Orlando Ortega, desembarca también como segundo del ranking continental sólo por detrás de un imparable Shubenkov.

Adel Mechaal y Toni Abadía (5.000), Fernando Carro (3.000 obstáculos), Javi Guerra (maratón), Pablo Torrijos (triple) y el ejército de la marcha son algunos nombres que prometen un buen Europeo para el atletismo nacional. Consagrados junto a promesas que se abren paso en la élite: Sara Gallego (17) en 400 metros vallas y María Vicente (17) en triple salto llegan a Berlín dispuestas a tomar la medida de un estadio olímpico. La catalana Vicente, doble campeona europea sub-18 de combinadas y triple salto, saltará a la pista con Peleteiro. «Presión cero, mis objetivos ya los he cumplido todos», dice sonriente.