Los campeones entran en la Universidad

El madrileño es uno de los deportistas que desea incorporarse a las aulas y en su caso se debe más a una necesidad. «No es que esté apurado. Yo ya puedo vivir por mí solo pero no me quedan 20 años en esto. Me queda poco, lo que pueda conseguir ahora es lo que he logrado. Con más beneficios podemos hacer más cosas. Hemos empezado por una empresa», señala quien reparte su tiempo para concentrarse en su proyecto para fomentar la difusión del patinaje sobre hielo. La formación académica ayudará especialmente en tiempos de crisis. «Cuanto más dinero tengamos, más puedo decir: 'Esto para mí y esto en un fondo de inversiones para el futuro de esta empresa'. Son cosas más inteligentes de planes para el futuro», añade.

Los pensamientos del futuro de Javier Fernández se presentan cuando apenas dispone de tiempo disponible para reflexionar sobre el presente. «Cuando terminamos el Campeonato del Mundo fui a Japón a hacer unas exhibiciones. Después he venido aquí, luego me iré a Canadá a otras exhibiciones y con un poco de suerte cogeré vacaciones y podré disfrutar un poco más de toda la temporada y del tiempo libre», señala quien no ha podido disfrutar de su oro universal, el del milagro. Nadie apostaba por él después de la exhibición del primer día de Yuzuru Hanyu. «No es que me lo esperarse, es que me hacía a la idea de que un segundo puesto no estaba mal después del programa corto. Pero acercándose el programa largo pensé: 'Vamos por lo menos a cambiar un poco el chip y pensar que es posible, pero tengo que hacer un programa perfecto y esperar también que el japonés, que ya me sacaba 12 puntos, a lo mejor no hiciese el programa de su vida o tuviera algún fallito y yo poder remontar con eso'. Y así pasó», confiesa.

La 'fisio' onubense

Junto a Javier Fernández asiente Carolina Marín, también doble campeona del mundo, con la carrera de Fisioterapia como meta. Pero la volantista no puede detenerse a pensar en sus éxitos recientes porque la próxima semana disputará uno de los campeonatos clave de la temporada: el Campeonato de Europa. Se colgó el oro en 2014 y para 2016 los precedentes no son tan halagüeños. «Este año los resultados no han sido los más esperados para mí, pero he pasado por momentos difíciles. He estado mala antes de la gira asiática, pero el momento será dentro de 100 días», avanza sobre su gran objetivo en la presentación de los nuevos deportistas estudiantes de la UCAM.

«Es irremediable pensar que queda muy poco para los Juegos, pero antes tengo torneos importantes en los que quiero conseguir buenos resultados. Pero todo esto es una preparación para Río, que está siendo muy diferente para llegar en las mejores condiciones», explica la onubense. Agosto es el mes del calendario más esperado y para esa cita la ambición no ha menguado. «Firmar no firmo nada. Quiero conseguir la medalla de oro. Supondría un pasito más a mi carrera deportiva, pero sobre todo una recompensa por todo lo que hay detrás. Nadie ve lo que hay detrás, sólo lo saben en mi círculo», reclama. Sería una matrícula de honor, una meta que ahora también podrá perseguir en sus estudios académicos.