Gómez Noya: «A medio plazo el objetivo son los Juegos Olímpicos de Río»

«Ha sido un año fantástico por ese titulo de campeón del mundo y también por el campeonato del mundo de medio Ironman. Ha sido un año de ensueño, lo intentaré superar, aunque será difícil, pero con hacerlo igual ya me sentiría satisfecho», dijo Gómez Noya.

«A medio plazo el objetivo son los Juegos Olímpicos de Río en 2016. Iré sin presión por la medalla de plata que gané en Londres, que palió el cuarto puesto de Pekín en 2008. Ojalá esté en condiciones de luchar por el oro en Río y dar una alegría. El haber conseguido una medalla y tener experiencia me hace prepararlo de manera relajada, pero quiero llegar en el mejor momento de mi carrera», confesó Gómez Noya.

«Es algo muy bueno para mi deporte. No estamos acostumbrados a reconocimientos multitudinarios, me agrada mucho y lo comparto con todos los triatletas», dijo. «Tengo mucha gente a la que agradecer porque sin ellos no estaría aquí. Mi familia, mis padres, mi hermano, amigos y compañeros, pero también otros triatletas como Iván Raña, que fue un espejo para mi, al igual que otros deportistas internacionales. No me olvido de mi actual entrenador, Carlos Prieto, y los que tuve como José Rioseco u Omar González», recordó.

Gómez Noya habló sobre el nivel del triatlón español, que calificó como «altísimo en categoría masculina», y sobre Mario Mola, subcampeón del mundo opinó: «A Mario lo he visto crecer. Tomó decisiones acertadas de irse a entrenar fuera y es un placer para mi conocerle porque es un amigo y, aunque en carrera somos rivales, es una persona increíble y es buenísimo. Yo creo no tiene enemigo ninguno y me alegro mucho por él con lo que ha conseguido», afirmó. Finalmente, el triatleta gallego reconoció que los rivales más duros a los que se ha enfrentado son los hermanos británicos Alistair y Jonny Brownlee.

«Me he enfrentado a varias generaciones de deportistas, pero de todos ellos los hermanos Brownlee son los más duros del mundo. Son impresionantes, cuentan con pocos puntos débiles y son muy difíciles de batir. Han generado una rivalidad bonita y me han hecho superarme», comentó.

«En el 2007 y 2008 yo dominaba el triatlón y Alistair me empezó a ganar con asiduidad. Eso me hizo trabajar más duro para seguir evolucionando. Fue el reto y cuando lo consigo me siento satisfecho», dijo Noya, que reconoció que «se aprende de rivales como ellos».