Estados Unidos copa el podio en 100 metros vallas

Ese verano, además, fue capaz de lograr una magnífica marca de12.26. Nadie corría tan rápido desde 1992. Pero luego se difuminó y no volvió a bajar de 12.50 hasta los Trials de 2016. En las pruebas de selección para definir el equipo estadounidense, precisamente, se quedó fuera del corte Kendra Harrison, quien unos días después, en Londres, batió el récord del mundo de los 100 metros vallas (12.20). Era una de las marcas más antiguas, desde que la búlgara Yordanka Donkova corriera en 21.21 en 1988.

Harrison, la nueva recordwoman, no pudo competir en los Juegos por las inflexibles normas de selección en Estados Unidos. Hubo quien criticó esa dureza, pero ahora han demostrado que no lo habían hecho tan mal cuando sus tres vallistas han subido al podio. Por detrás de Rollins (12.48 sin viento) entraron Nia Ali (12.59) y Kristi Castlin (12.61).

Es la primera vez en la historia olímpica que Estados Unidos logra las tres medallas en cualquier prueba. Del mismo modo que es la primera ocasión que tres atletas de un mismo país acaparan las preseas de los 100 m vallas. A Harrison no le comió la envidia. Al contrario, la plusmarquista mundial no tardó en felicitar a sus compatriotas por las redes sociales. El futuro debe ser suyo.