«Sueño cada noche con estar en el podio»

atleta española

Igor Barcia

Miércoles, 17 de agosto 2016, 02:26

Hace cuatro años, en los Juegos de Londres, Ruth Beitia decidió que ya era suficiente, que era el momento de dejar la exigencia del atletismo profesional. Pero la cántabra, después de unos meses de desconexión, entendió que todavía estaba enganchada a un deporte en el ... que tenía cosas que decir y hacer. Cuatro años después, tras dos títulos europeos al aire libre, uno de pista cubierta, un subcampeonato mundial bajo techo, y dos bronces en mundiales al aire libre e indoor conseguidos en este periodo, Ruth Beitia afronta el que es su «gran sueño», alcanzar una medalla olímpica que sería «el colofón perfecto para mi trayectoria en unos Juegos, que del resto todavía no se sabe», ríe. La cántabra, que califica este dulce periodo que está viviendo como «una maravillosa segunda oportunidad», confiesa a este periódico que afronta desde mañana la cita de Río plenamente convencida.

¿Cómo ha ido la preparación para estos Juegos?

He entrenado fenomenal. La ultima semana antes de viajar a Río estuve arropada con mi equipo multidisciplinar y tengo muchas ganas de ponerme 100% en la competición.

Supongo que ha sido una puesta a punto muy especial...

Sí, afrontamos los últimos Juegos y tengo la sensación de que todo ha ido muy bien. La preparación considero que ha sido perfecta y me queda ese momentito para decir ya estoy aquí. Voy a vivirlo a tope.

¿Sigue sintiendo esa sensación especial de afrontar unos Juegos?

Siempre, son cada cuatro años y cualquier deportista tiene el sueño de ser olímpico y para mí es algo muy especial afrontar estos cuartos Juegos. La vida me dio una segunda oportunidad que no pensé que llegaría y en eso estoy ahora. Han pasado cuatro años fantásticos que he vivido como un regalazo y tengo que aprovechar este momento. Y si tengo una sensación de algo es de que cada día suma.

Cuantas cosas han pasado en estos cuatro años desde Londres, cuando anunció que dejaba el atletismo...

Muchas cosas y todas buenas, con esa sensación que he dicho de que todo suma. Incluso cuando el año pasado la temporada de pista cubierta no fue buena por mis problemas con la carrera, tuve el valor de cambiar y empecé a correr desde parado. Fui capaz de dar un giro total con 36 años y todo salió bien, así que repito que han sido cuatro años inimaginables. Tengo la sensación de que estoy viviendo una segunda oportunidad con la persona ideal que es mi entrenador Ramón Torralbo.

¿Ha quedado atrás la presión y la ansiedad a la hora de afrontar las grandes citas del calendario?

La presión está ahí, pero con la sensación de que todo suma. No hay nadie que quiera más esta medalla que Ramón y yo, eso por supuesto está ahí. Pero ya no existe una ansiedad como hace cuatro años, por ejemplo, ahora se transforma en algo positivo. Es algo con lo que mi entrenador y yo llevamos soñando y peleando desde que empezamos este camino juntos hace 26 años y creo que es el momento de que se haga realidad. Si no ocurre, no pasa nada, y si ocurre, seremos las personas más felices del mundo.

Estar en el podio sería...

Sería el broche perfecto en los Juegos, lo demás nunca se sabe, ya lo dije una vez y quizás hice mucho daño a mucha gente. Y ahora cuando me preguntan por la retirada, a la que le duele es a mí, así que ya no hablo de ese tema, jeje.

¿Cómo ve la competición? Da la sensación de que hay un grupo de saltadoras muy igualadas...

Mira, la veo en el aquí y en el ahora. La veo con la sensación de que tengo que luchar mucho, tengo que tener un respeto por mis rivales increíble, pero ese respeto es con la sensación de que las puedo ganar. Es la última oportunidad de mi sueño y sé que tengo que luchar mucho por una medalla, pero como siempre, lo haré con mucha dignidad. Quiero situarme en el estadio, en la final, y luchar por ese sueño.

Ganar el Europeo en Amsterdam tuvo que ser un plus de confianza muy importante...

Fue un paso intermedio increíble. No iba ni como favorita, ni como referente de la competición. Sabía que podía estar ahí, pero era un paso intermedio en el camino hacia los Juegos, que es mi verdadera meta. De hecho, no lo he celebrado ese título, como tampoco he celebrado mis tres victorias en la Diamond League, porque lo veo como parte de un proceso, así que es una alegría contenida que algun día hará explosión. Pero sí es cierto que es un aval que me reafirma y me dice que puedo pelear por mi sueño. Quizás se haga realidad.

Allí dio una demostración de cómo competir en una final, ¿un aviso para sus rivales?

Bueno, las rivales creo que me hace tiempo que me perdieron el respeto, jeje. Tenemos un clima fantástico de compañerismo entre todas, y en cada competición todas queremos ganar, pero existe rivalidad sana.

El rendimiento español

Se está hablando de nuevo del rendimiento de los atletas españoles. Parece que el gran resultado en el Europeo desató expectativas quizá poco realistas...

Hay que tener en cuenta que no solo van 10 países sino más de 200 y es muy complicado lograr medallas en competiciones donde determinados países van evolucionando mucho. Como capitana pido a todos que salgan del estadio con la sensacion de haber competido a tope, de haber vivido la experiencia y de haber sumado una experiencia que les lleve a aprender de cara al futuro.

En la prueba de altura faltarán sus tradicionales rivales rusas. ¿Qué opina del tema de su exclusión por dopaje de Estado?

La respuesta ya la sabes, no soy nada polémica, siempre me gusta ser persona y yo no soy la que decide quién va y quién no va. Pienso en el día D y la hora H y en estar en el grupo de finalistas. Y las que estemos ahí seremos las justas merecedoras, porque no decidimos sobre la participación en los Juegos. Y que no estén las rusas en ningún momento ensombrecerá el resultado de la competición, sea cual sea.

¿Con usted en el podio?

Sueño cada noche con estar en el podio.