España cede un empate pero llega a cuartos con buenas sensaciones

Con el billete de cuartos en el bolsillo y con el resto de la jornada por delante, hicieran lo que hicieran ambos equipos en este encuentro no les iba a decir mucho en cuanto al futuro emparejamiento.

Así, tanto España como Montenegro no especularon lo más mínimo y saltaron a la piscina con todas sus armas para cerrar la fase de grupo con las mejores sensaciones posibles independientemente del resultado.

Los dos equipos, el de Hernández y el de Vladimir Gojkovic, se conocen a la perfección. Esta última temporada se habían enfrentado tres veces y se habían repartido un triunfo para cada uno más unas tablas.

Los balcánicos, instalados en la elite del waterpolo europeo y mundial desde prácticamente su entrada en competición tras la independencia, son un conjunto poderoso con grandes lanzadores y por tanto un rival de peso para cerrar esta fase.

España volvió a exhibir buena defensa por momentos, pero sobre todo el guardameta Dani López Pinedo volvió a protagonizar un festival, a cuajar una actuación excelsa.

Tras acabar el primer parcial con empate a dos, en el segundo, Sasa Misic y Mladan Janovic dieron el primer estirón (4-2), pero España recuperó su esencia y antes del descanso el capitán, Willy Molina, acortó distancias.

En la reanudación, continuó la progresión de España, que completó un parcial de 0-4 con los goles de Alberto Munárriz, Roger Tahull y Marc Roca para situar el 5-7 en el electrónico.

Y fue a partir de aquí cuando los hombres de Gabi Hernández permitieron la reacción de los montenegrinos, principalmente gracias a sus contragolpes aprovechando despistes en el repliegue.

Con 7-8 para España se encaró el último parcial, en el que volvieron a aparecer las defensas y se frenó el marcador. Fran Fernández, a 2.14 situó el 8-9 pero Aleksandar Radovic respondió para firmar el 9-9 definitivo que deja a Montenegro cuarta del grupo B y a España, a la espera de lo que hagan Croacia e Italia en sus partidos, podría acabar entre primera y tercera.