Una decisión muy ajustada deja a Escobar sin medalla

Minutos después, en la zona mixta, el seleccionador nacional, Rafa Lozano, estallaba de ira contra los dos jueces marroquíes, a los que acusó de haber votado siempre en contra de los boxeadores españoles. «Se lo dije a la organización para que lo tuvieran en cuenta, pero les ha dado igual, han vuelto a poner a uno de ellos. No me da la gana de callarme porque le han quitado su medalla. Esa medalla era suya. No sé si de bronce, de plata o de oro, pero era suya», explotaba.

El combate fue reñido. En el primer asalto, el boxeador kazajo sorprendió a Escobar y se aprovechó de su mayor altura para dominar el combate, pero en el segundo 'round' el púgil de Leganés demostró haber aprendido la lección y se impuso con claridad. La solución quedaba para el último capitulo del combate: tres minutos confusos, con ataques nerviosos del español y algunos golpes certeros del kazajo. La decisión quedaba en manos de los jueces: el marroquí contra el que cargó Lozano, Makfouni Abdellatif, y sus cuatro colegas: un tailandés, un austriaco, un ruso y un ugandés. De los cinco jueces, tres entendieron que Escobar había sido más agresivo y había demostrado más voluntad de ganar el combate en ese tercer asalto, pero la suma final de su puntuaciones determinó que Saken Bobbosinov había ganado el combate por un estrechísimo margen (3-2).

Si Lozano estaba airado, Escobar compareció desolado. «Yo soy un trabajador -dijo-, no entiendo de política. Solo sé que en el tercer asalto, al saber que estaba empatado, he tirado con todo y creo que era el justo ganador». Con la despedida de Gabi Escobar, el boxeo español se marchará de Tokio sin metales. Ninguno de los tres púgiles que se habían clasificado para cuartos, Jalidov, Reyes y el propio Escobar, ha conseguido superar la barrera que franquea el acceso al podio.