El final más cruel para un mito como Laia Palau

«Es un día triste para nosotras, porque ha sido un verano cruel. Hemos perdido en dos cuartos de final (en el Europeo de Valencia y ahora en los Juegos); hoy en un partido con un equipo que nos ha ganado muchas veces y al que hemos ganado pocas, pero importantes veces. Sigo pensando que en este equipo hay cosas que se pueden hacer. Tal vez no ha sido el verano maravilloso que esperábamos pero auguro un buen futuro para el baloncesto español», ahondó una Palau que atesora tres participaciones en Juegos (una plata), cinco Mundiales (una plata y dos bronces) y ocho Europeos (tres oros, una plata y cuatro bronces).

«Ejemplifica el resurgir ambicioso del baloncesto femenino. La vamos a echar de menos», dijo poco después el presidente de la Federación, Jorge Garbajosa, que resumió de forma muy gráfica su trayectoria. «Laia es eterna. No se trata de ponerla por encima o por debajo de Pau, que también es eterno. Laia representa la subida de calidad, visibilidad y ambición del deporte femenino. Me da pena que no se haya podido ir como se merece».

Porque España cayó ayer ante Francia en un encuentro muy igualado que se resolvió en los últimos segundos. Ahí, como ya le ocurrió en el Eurobasket, faltó algo de fortuna y de liderazgo. Ausente entonces Torrens por un positivo en Covid y también fuera de la pista ayer tras haber sido eliminada por faltas personales. Sin ella, nadie supo resolver en los instantes finales, donde Francia tuvo más temple para asegurar su pase a la lucha por las medallas. Eliminación que deja devastada a España, en un verano para olvidar.

El partido, en todo caso, fue de extremos. Empezaron bien las de Mondelo ante una Francia que es siempre un equipo físico y plagado de calidad. Una combinación que debería ser ganadora casi siempre, pero que pocas veces les funciona. Son perdedoras habituales -han perdido cinco finales seguidas del Eurobasket- y eso cala. Volvieron a salir apocadas las francesas, superadas por la seguridad de la selección. Pero todo cambió en el segundo cuarto, cuando las galas endosaron un parcial de 19-3 que les dio 14 puntos de ventaja. A partir de ahí fue un remar contracorriente de las españolas que llegaron a ponerse un punto por delante a falta de poco más de cuatro minutos.

Volvía a estar España metida en el partido mucho tiempo después gracias a su fe y a su defensa. Se le había metido el miedo a Francia, que se levantó con dos canastas de Miyem y que aguantó luego gracias a Williams. La respuesta de España, ya sin la eliminada Torrens, fue otra vez Cazorla (64-65, min. 40). Llevó entonces la selección a Duchet a los tiros libres y la base solo anotó uno, lo que le dio a España una última posesión para forzar la prórroga o ganar el partido. Dibujó la jugada Lucas Mondelo para que el balón le llegara a Cazorla, pero el pase errático de Silvia Domínguez evitó la épica. Tuvo aún otro tiro España, después de que Williams hubiera ampliado un punto la diferencia, y tampoco acertó la base, cuyo lanzamiento ni siquiera tocó el aro. Adiós para la selección, que se queda también sin medallas en los Juegos.