Escándalo en la hípica británica: su estrella no irá a los Juegos por azotar a un caballo

La hípica, que buscaba recuperar un prestigio cada vez más socavado por los supuestos malos tratos a los animales, se enfrenta de nuevo a la misión de lavar su imagen. Y es que, el video de la amazona alemana Annika Schleu pateando a Saint Boy -su caballo- en los juegos de Tokio de 2020 dieron la vuelta al mundo y pusieron en evidencia el sufrimiento de los animales que participan en los eventos deportivos.

Como era de esperar la organización PETA UK -la rama británica del colectivo que defiende los derechos de los animales- también se ha pronunciado al respecto y ha tachado este acto de «horrendo e inaceptable». Además, ha vuelto a pedir al comité olímpico, como ya hiciera en el 2021, que los deportes ecuestres se eliminen de las competencias deportivas. El movimiengto animalista recuerda que no se trata de unos malos tratos aislados y ha sacado a relucir otros casos similares en su cuenta de «X», en los que, por ejemplo, se ve a un entrenador propinando puñetazos a un caballo.

Las disculpas públicas de Dujardin no fueron suficientes para frenar el escándalo ni las repercusiones para su carrera. La Federación Ecuestre Internacional (FEI) ya ha sancionado a la deportista por un semestre fuera de la competición «con efecto inmediato a partir de la fecha de notificación, el 23 de julio de 2024».

Dujardin iba a competir en doma individual y por equipos pero ahora será sustituida por Becky Moody. La amazona ahora sancionada se enfrentaba al reto más importante de su carrera ya que podía superar a la ciclista Laura Kenny como la deportista británica con más medallas olímpicas de la historia. Sus desmanes ya le han hecho perder esa oportunidad.