El Mazo se encargará de dictar sentencia

Los primeros minutos han estado envueltos en un ambiente ensordecedor. Las dos aficiones apretaban y ninguno de los dos equipos quería cometer fallos en unos primeros instantes que en este tipo de eliminatorias suelen valer para soltar los nervios. Era el Zamora quien intentaba coger la manija del choque y quien ha tenido las primeras llegadas. Dani Hernández ha probado a Sobrón con un disparo duro, raso, a la cepa del poste, que ha enviado el arquero a córner.

Pero poco a poco el Haro ha empezado a ganar terreno. A base de un buen trabajo defensivo, ha comenzado a encontrar espacios en transiciones rápidas apoyados en Iván Arana y sobre todo Mikel Bueno. La más clara de los riojanos la ha tenido Facu, pero tras quedarse solo en el mano a mano con el arquero zamorano ha dudado y ha dado tiempo a Coque a cortar en una acción providencial al cruce en el punto de penalti. Eran buenos minutos para el Haro, siendo muy superior también en el balón parado, y haciendo sufrir al Zamora. La escuadra de Movilla no encontraba fluidez, se atascaba en la circulación y caía en la trampa de un Haro que se mantenía muy firme atrás.

No ha sido hasta los últimos quince minutos de la primera parte cuando el choque ha vuelto a igualarse. De hecho, ha sido en ese tramo cuando el Zamora ha tenido la ocasión más clara. Murci ha rematado ante el meta un balón muerto dentro del área y cuando el balón entraba mansamente a gol, Ibáñez lo salvaba prácticamente sobre la línea.

Se alcanzaba el descanso con el empate a cero inicial. Quedaba por delante una segunda parte de infarto. Fue ahí donde han llegado los goles. Lejos de pensar en el partido de vuelta, los dos equipos han tratado de imponerse sobre el césped. Parecía que las riendas del segundo acto las tomaba el Zamora pero el Haro golpeaba primero y conseguía una diana que puede valer oro en la vuelta. Joseba García conectaba un disparo desde la frontal y batía a Villanueva con el tiro raso, pegado al palo. Era el 0-1 y el delirio se instalaba en la hinchada visitante.

Ese gol ha espoleado al Zamora. Hasta entonces no se había visto la mejor versión de los rojiblancos, pero a partir de ese 0-1 sí se vio lo mejor. Las lesiones han hecho mella en el Haro, que ha notado el aspecto físico en el tramo final. El Zamora ha ido a más, a tumba abierta, sabiendo que era ahora o nunca y tiró de corazón. Apoyado en la hinchada, los rojiblancos le han dado la vuelta al marcador. Garban con un disparo desde la frontal en el minuto 75 y Asiel de cabeza en una falta en el 79 le daban la vuelta al duelo en apenas cuatro minutos.

Restaban diez minutos. El Zamora ha intentado aprovechar la inercia para hacer el tercero y lo ha rozado en un par de acciones. Por su parte, el Haro ha intentado no sufrir más daños y lo ha logrado. Al final, un 2-1 que da una ventaja al Zamora pero que deja todo por decidir en la vuelta, en el campo del Mazo.

El entrenador del Haro se mostraba satisfecho por el partido realizado por sus jugadores y comentaba tras el mismo: «Estoy orgulloso, teníamos una empresa complicada ante un equipo profesional. Pero solo puedo agradecer a mis jugadores el momento que hemos vivido en un campo de Primera o Segunda División en un ambiente precioso«, ha expuesto. »Felicitarles porque ha sido muy bonito«, ha añadido.

Aparte, Calle valoró el resultado. «Es cierto que nos hemos adelantado, no hemos sido capaces de seguir, las piernas nos pesaban y nos costaba seguir, es normal porque somos un equipo amateur. Encontramos lo que buscábamos que era marcar un gol y llevar la eliminatoria viva a la vuelta«, ha comentado. »Tenemos muy claro lo que queremos hacer y cómo lo podemos hacer. Estamos muy vivos pese a la derrota. Me voy con sabor a victoria y creo que en la vuelta la plantearemos un partido difícil para intentar lograr el ascenso», ha concluido.