El líder se atasca en Oyón

Un punto que sirve además para certificar el gran año que el equipo alavés está realizando, en especial en su feudo, donde los mejores han doblado la rodilla.

Nadie regala nada en este grupo, y hacer cuentas a largo plazo solo sirve para perder la noción del rival al que te enfrentas. La victoria del Varea obligaba a la SDL a hacer lo propio, ganar y marcar con una equis un campo ya citado como complicado. Con Imanol esperando su oportunidad en el banquillo, el conjunto de Albert Aguilá se apoyó en la potencia de Naceur para crear peligro. Desde la derecha, la SDL generaba centro tras centro, pero sin encontrar latido alguno. Borja y Naceur enfilaban el colmillo desde la única zona del campo donde la Oyonesa demostraba debilidad. Achi tuvo la más clara, que malogró tras mandar a las nubes un gran centro desde el costado derecho.

Nada más reseñable aconteció en un primer tiempo donde la Oyonesa no generó peligro a la zaga visitante. Ledo avisó con un remate de cabeza desviado, que el líder no se iba a rendir tan temprano. Tuvo la primera aproximación con peligro de una segunda parte en la que Aguilá modificó su esquema con el objetivo de desatascar el embudo que el sistema de cuatro centrocampistas de la Oyonesa había conformado. Retrasó a Naceur al lateral y dio entrada a Imanol para con Binke, conformar el ataque. Centros al área. Era la única forma de gobernar y facturar el partido a favor de los visitantes. Lo intentaron, pero la red echada por la Oyonesa desconectó cualquier tentativa. La volvió a tener Achi, tras dibujar un buen desmarque que vio Lacruz, quien sustituyó a Diego en el descanso.

El juego era visitante, el balón era de su propiedad, pero el tiempo y el sentido del encuentro lo tenía la Oyonesa. A media hora del final, lo tenían donde querían. Toque y toque, posesión y posesión, pero baldía. Imanol tuvo el primero con un disparo en el área pequeña, pero nada, la sombra defensiva lo mandó a la esquina.

Eran ocasiones, pero sin la lucidez requerida para que terminaran cruzando la línea del éxito. Y los minutos pasaban, y la maraña defensiva blanquiazul seguía intacta. El líder no fabricó llegadas en el último tramo del duelo, salvo un rechace ya a la desesperada de Achi en el borde del área que ni generó incertidumbre. El colegiado, correcto en todo, alargó cuatro minutos la resistencia alavesa. Que ni Ledo, de ariete, pudo romper en pedazos. Un empate que tira por el sumidero la ventaja con respecto al Varea. Ambos suman 58 en la cima de la tabla.