Un final de infarto en La Salera

Primero fue Tabuenca el que pudo poner a los alfareños con ventaja, desaprovechando una gran ocasión, solo dentro del área, pero su remate se marchó fuera por muy poco. Acto seguido, un ataque a la desesperada de los blanquiazules sirvió para que Javi Martínez aprovechase un balón enviado al área, que se encargó de llevar a las mallas. Así lograban los najerinos una victoria que habían merecido.

El partido comenzó con los dos equipos tratando de manejar el balón con criterio, lo que propiciaba que el juego se desarrollase sin llegadas al área, algo en lo que ambas defensas también colaboraban, cerrándose bien e impidiendo las llegadas ante ambos guardametas. Sin embargo, en una jugada marca de la casa, Orodea ganaba un balón en profundidad superando a los defensas y se plantaba junto al poste izquierdo del meta Heredia, centrando hacia atrás para que Javi Martínez marcase a puerta vacía.

Cinco minutos más tarde, los riojabajeños realizaban su primera jugada con cierto peligro para la meta de Gonzalo. Nacho Navajas disparaba desde el borde del área para que el portero local detuviera el cuero junto a la cepa de su poste izquierdo. Hasta el descanso, los locales llegaron con más peligro, pero sin el acierto necesario para ampliar su ventaja. Los de Salvatierra, por su parte, seguían tratando de hilvanar jugadas, pero sin que éstas se tradujesen en peligro.

Tras la vuelta del vestuario, los blanquillos (ayer de verde), adelantaron sus líneas y, sobre todo, parecieron haber recibido la consigna de rematar más a puerta, ya que en los primeros minutos tras la reanudación lo intentaron varias veces. En una de ellas, Navajas estuvo a punto de marcar de cabeza. La réplica llegó de Javi Martínez, quien se plantó ante Heredia y éste le arrebató el cuero de los pies en dos tiempos y con mucho arrojo.

El partido iba transcurriendo con la sensación de que la exigua ventaja local podía propiciar el disgusto y así fue. En el minuto 81, Gordo derribaba dentro del área a Navajas y la árbitro señalaba el penalti. El propio Navajas se ocupaba de marcar. Poco después, Michel realizaba una buena jugada con centro raso que nadie aprovechó. Luego llegaron los minutos ya relatados, en los que los locales consiguieron vencer.