Una fase de ascenso local y con temores en Tercera

Eduardo Guerra, presidente de la SDL, que abogaba por el ascenso de los líderes, asegura que el «'play off' con mezcla de grupos servía para que subiese el equipo con más calidad» y que la calidad, en la liga regular, la da la clasificación, pero insiste en que «no hay que volverse locos». Mientras, su rival, el Arnedo, en boca de su presidente, Ildefonso Ruiz, se siente favorecido: «La Segunda B está a 180 minutos y no a 540. Para los cuartos era muy difícil subir; ahora, un poco menos».

Mientras, Ángel Aguado (Varea) avala el 'play off' pero quiere llegar a él «como primero». «No es por quitar nada a la SDL, tanto ellos como nosotros hemos hecho un temporadón y ojalá tuviésemos premio los dos. Pero estamos igualados y en ningún sitio pone nada del 'goal average' particular o general. Si hay que jugar contra ellos, igual podría haber penaltis porque estamos igualados».

Para el Casalarreina, el problema es otro. Su presidente, David Fernández, más allá de pensar en la posibilidad de jugar el partido, se encuentra con el problema de preparar el duelo, si se produce. «Tenemos totalidad de la plantilla fuera de la provincia, y al no ser profesionales necesitaremos permisos especiales para que puedan entrenar. De otra manera, será imposible que podamos jugar», señala Fernández.

Porque las dudas son muchas. En primer lugar, las condiciones sanitarias, siempre supeditadas al Ministerio de Sanidad. «Debemos tener la seguridad de que nadie se va a contagiar, especialmente los futbolistas», incide Ruiz. También es clave los contratos de los jugadores, que acaban el 30 de junio. «Va a representar sobrecostes y desde la RFEF ya nos han dicho que no iba a haber más ayudas», analiza Eduardo Guerra. También resulta clave conocer el protocolo, contar con instalaciones, su desinfección... e, incluso, conocer las clasificaciones definitivas y las normas del 'play off', ya que dos primeros que no asciendan podrían ser repescados para llegar a cien equipos en Segunda B, pero no se sabe si será por coeficiente, resultados...

Y otra de las claves, aún sin respuesta, es quién realizará las pruebas contra el COVID-19, cómo y quién las paga. «Si además de perder taquillas, ampliar los contratos, devolver dinero a los abonados... tenemos que pagar los clubes los tests será un desastre», resume Guerra. Y, en el aire, qué ocurrirá con la temporada 20/21, con 22 equipos en Tercera y menos tiempo, lo que puede conllevar la creación de subgrupos.