Susto y de los grandes el que se vivió este sábado en el campo de San Roque. Comenzaba el tiempo del descuento del partido que enfrentaba al Agoncillo con el River Ebro cuando ocurrió el suceso que provocó un vuelco en los corazones de ... todos los presentes en el campo del equipo avionero.
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Christian, Sergio (Álvaro, 83), Unai (Martín, 46), Edu Castro, Riaño, Omar (Isra, 57), Ochoa, Alonso, Vitorica, José (Alexander, 46) y Kone (Jorge, 57).
YAGÜE 1
-
BALSAMAISO 4
Adrián, Dhruv, Munilla, Medrano, Néstor (Marcos, 87), Oier (Sergio, 87), Íker Osua (Marco, 62), Luhe (David, 87), Lorente, Borja y Álvaro.
Los locales iban ganando 2-0 gracias al doblete de Marcos Jodra cuando su compañero Juan Cruz sufrió una grave lesión que obligó al colegiado a parar el encuentro durante cerca de cuarenta minutos.
Llegaron los servicios de emergencia para trasladarle al Hospital San Pedro, donde le realizaron las pruebas correspondientes para revelar la gravedad de su lesión en el tobillo.
Una vez finalizó el partido sus compañeros dedicaron a Juan Cruz la victoria con una imagen dentro del vestuario.
Además del partido en el San Roque, en El Salvador se resolvió simultáneamente el choque que midió al Yagüe con el Balsamaiso.
Los de La Estrella esperaron al segundo tiempo para adelantarse en el marcador con el tanto de Medrano. Amplió la ventaja Íker Osua para que en el tramo final Jorge acortara distancias para los locales. Poco duro la alegria al conjunto amarillo ya que Luhe y David traspasaron la puerta Christian para poner el 1-4 en el marcador antes de que Iara viera su segunda cartulina amarilla.
El resto de encuentros de la jornada se resolverán este domingo por los diferentes campos de La Rioja, entre los que se encuentra Sendero. Sobre su tapete, el Arnedo peleará a las 17.00 horas por plantar cara a un Náxara que se ha convertido en el intratable del curso. Líder en solitario, el conjunto de Nájera es el único equipo de la categoría que cuenta sus partidos por victorias siendo el más goleador y el menos goleado, al mantener su portería a cero. Un hueso duro de roer que intentará debilitar el conjunto local para dar la campanada del fin de semana.
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