El Varea arrolla en La Salera

La primera ocasión del partido fue local, aunque el Varea dejó pronto claro que llegaba a La Salera para tomar el mando del partido, con dominio en la posesión y cortando rápido los intentos ofensivos najerinos. Le faltaba un poco más de intensidad en ataque al equipo arlequinado, y en cuanto surgieron las ideas comenzó a finiquitarse el partido. En el minuto 37, Rocha puso un centro desde la izquierda que acabó en los pies de Esaúl, junto a la esquina del área, que ajustó su disparo para abrir el marcador. Tres minutos después, en un error impropio del Náxara, Rubén cabeceó solo una falta colgada por Chimbo para hacer un 0-2 que dejaba, justo antes del descanso, profundamente tocado al Náxara.

Pese a ello el equipo blanquiazul tuvo un momento de empuje por orgullo propio en los primeros instantes del segundo tiempo, con un duro disparo de Gabri desde fuera del área que atajó Raúl como la mejor ocasión. La ilusión fue efímera. Dos fallos defensivos permitieron a Rubén acabar por sentenciar el encuentro cuando todavía quedaba media hora por delante. El delantero cabeceó de nuevo solo un centro de Chimbo para hacer el tercero, mientras que el cuarto llegó por un error de Fermín, que perdió el balón al intentar recortar a Rubén dejando la portería vacía al vareano.

El Náxara, un equipo caracterizado por su intensidad y su seriedad defensiva desde el primer al último hombre, no se reconocía. El líder estaba a la altura pero su rival no. Quedaba tiempo para que los locales intentasen maquillar la goleada y al menos tuvieron el mérito de levantarse para recortar. En el minuto 69, Nika entró con fuerza para cabecear al fondo de las mallas un saque de esquina, mientras que en el 84, un disparo de Lozano pegaba en el palo, en la pierna de Adrián y entraba, o al menos así lo consideró el colegiado, pese al intento de Raúl Torres por evitarlo sobre la línea.

Quedaba tiempo, sin embargo, para el quinto del Varea y el cuarto de Rubén, que cerraba el marcador empujando un centro de Rocha. Los arlequinados finiquitaban el asalto a La Salera, donde el Náxara estaba imbatido en Liga desde hace más de año y medio. Fue un partido sin demasiada historia, en el que el líder dio un importante golpe en la mesa y una muestra más de que su juego y goles van acompañados de una competitividad superlativa.